Balance general: pasivo y capital contable
El balance general proporciona a los acreedores, inversores y analistas información sobre los recursos (activos) de la empresa y sus fuentes de capital (su patrimonio y pasivos). Normalmente, también proporciona información sobre la capacidad de ganancias futuras de los activos de una empresa, así como una indicación de los flujos de efectivo que pueden provenir de cuentas por cobrar e inventarios.
Los pasivos representan las obligaciones de una empresa derivadas de acontecimientos pasados, cuya liquidación se espera que dé lugar a una salida de beneficios económicos de la entidad.
Basado en los informes: 10-K (Fecha del informe: 2018-10-31), 10-K (Fecha del informe: 2017-10-31), 10-K (Fecha del informe: 2016-10-31), 10-K (Fecha del informe: 2015-10-31), 10-K (Fecha del informe: 2014-10-31), 10-K (Fecha del informe: 2013-10-31).
- Tendencia en los pagarés y empréstitos a corto plazo
- Se observa una disminución significativa en los niveles de pagarés y empréstitos a corto plazo desde aproximadamente 5,979 millones de dólares en octubre de 2013, hasta un mínimo de 78 millones en octubre de 2016. Posteriormente, se registra un incremento que lleva a 1,463 millones en octubre de 2018, evidenciando una variabilidad en esta línea de financiamiento a corto plazo.
- Patrón en cuentas a pagar
- Las cuentas a pagar muestran una tendencia creciente a lo largo del período analizado. Desde 14,019 millones en 2013, aumentan progresivamente hasta aproximadamente 14,816 millones en 2018, con ciertos altibajos en el período. Este comportamiento puede reflejar un aumento en las obligaciones comerciales o cambios en las condiciones de pago con proveedores.
- Evolución en compensaciones y beneficios de los empleados
- Este concepto presenta una reducción desde 4,436 millones en 2013 hasta un mínimo de 759 millones en 2016. Sin embargo, en años posteriores, presenta un incremento paulatino hasta 1,136 millones en 2018, lo cual puede indicar una estabilización en las obligaciones relacionadas con beneficios laborales.
- Curso de los impuestos sobre las ganancias
- Los importes de impuestos sobre las ganancias muestran una tendencia a la baja desde 1,203 millones en 2013 a un mínimo de 231 millones en 2016, para posteriormente incrementarse a 340 millones en 2018. La significativa reducción en 2016 puede estar relacionada con beneficios fiscales, reestructuraciones o cambios en la utilidad imponible.
- Evolución en reestructuración acumulada
- La reestructuración acumulada alcanza un máximo de 901 millones en 2013 y se mantiene muy estable hasta 2015, con valores cercanos a 689 millones. La ausencia de datos posteriores podría indicar que no se registraron nuevas reestructuraciones o que estas fueron amortizadas.
- Comportamiento de otros impuestos devengados
- Esta categoría muestra una tendencia descendente desde 2,703 millones en 2013 a 755 millones en 2016, aunque en los años siguientes se observa una recuperación, alcanzando cerca de 982 millones en 2018. La variabilidad puede estar vinculada a cambios en la normativa fiscal o en la situación financiera de la empresa.
- Evolución de la garantía
- Las garantías disminuyen gradualmente desde 1,390 millones en 2013 hasta 673 millones en 2018, indicando posiblemente una reducción en las garantías ofrecidas o en el nivel de respaldo requerido en los instrumentos financieros.
- Ingresos diferidos
- Los ingresos diferidos presentan una tendencia decreciente respecto a 2013, pasando de 6,477 millones a 1,095 millones en 2018, con picos y caídas intermedias. La disminución puede reflejar el reconocimiento progresivo de ingresos anteriormente diferidos a medida que se prestan los servicios o se entregan los productos.
- Patrón en programas de ventas y marketing
- Este concepto mantiene un crecimiento constante desde 2,823 millones en 2013 a 2,758 millones en 2018, con pequeñas variaciones. Esto indica una inversión progresiva o sostenida en actividades de promoción y adquisición de mercado.
- Otros conceptos de ingreso y pasivos no bridados
- Otros pasivos acumulados muestran una tendencia decreciente, desde 18,983 millones en 2013 a 7,376 millones en 2018, aunque con un incremento en 2018 respecto a 2016. Esto puede reflejar una disminución en pasivos diversos o provisiones, pero con cierta volatilidad.
- Pasivos corrientes
- Los pasivos corrientes se reducen notablemente de 45,521 millones en 2013 a 18,808 millones en 2016, para luego incrementar hasta 25,131 millones en 2018. La caída podría indicar una administración efectiva de obligaciones a corto plazo en ciertos años, mientras que la recuperación indica un aumento en las obligaciones o financiamiento a corto plazo en años posteriores.
- Deuda a largo plazo, excluida la parte corriente
- La deuda a largo plazo muestra una reducción significativa desde 16,608 millones en 2013 hasta 4,524 millones en 2018, con un pico en 2015 de 21,780 millones. La tendencia indica un proceso de disminución del apalancamiento a largo plazo y posible amortización de deudas antiguas o refinanciamiento en condiciones favorables.
- Pasivos por pensiones, post-jubilación y post-empleo
- Estos pasivos decrecen desde 5,098 millones en 2013 a 1,645 millones en 2018, señalando una gestión efectiva de obligaciones relacionadas con beneficios a empleados pasivos, o cambios en las políticas de pensiones.
- Pasivos por impuestos diferidos
- El importe en esta categoría experimenta una disminución significativa, desde 2,668 millones en 2013 a apenas 100 millones en 2018, lo que puede reflejar una reducción en diferencias temporales o cambios en la estructura fiscal de la empresa.
- Deuda tributaria
- La deuda tributaria mantiene niveles relativamente estables en torno a 2,2 a 2,6 mil millones durante todo el período, con leves incrementos en ciertos años, sin una tendencia clara de aumento o reducción significativa.
- Ingresos diferidos en pasivos
- Estos también muestran una tendencia a la baja desde 3,907 millones en 2013 a 1,005 millones en 2018, probablemente reflejando reconocimiento de ingresos diferidos a medida que se realiza la entrega de bienes o servicios.
- Patrón en otros pasivos no corrientes y pasivo total
- Otros pasivos no corrientes decrecen desde 15,891 millones en 2013 hasta 5,606 millones en 2018, y el pasivo total también muestra una disminución de 78,020 millones en 2013 a 35,261 millones en 2018. Este comportamiento indica una clara tendencia de reducción en las obligaciones totales de la empresa a lo largo del período analizado, posiblemente por amortizaciones, refinanciamiento o disminución en obligaciones contingentes.
- Capital social y capital contable
- El capital social en acciones ordinarias presenta una ligera disminución de 19 millones en 2013 a 16 millones en 2018. Sin embargo, las utilidades retenidas (o déficit acumulado) reflejan fluctuaciones significativas, con un saldo positivo en 2013, crecimiento en 2014 y 2015, seguido de una pérdida neta importante a partir de 2016, culminando en un déficit de -473 millones en 2018. La caída en el capital contable total (con déficit en 2016 en adelante) señala deterioro en la rentabilidad acumulada y posible impacto en los acuerdos con accionistas.
- Participaciones minoritarias
- Este concepto permanece muy estable alrededor de 380 millones en 2013 y 2014, sin datos posteriores, lo que indica una participación minoritaria relativamente estable en la estructura del capital.
- Resumen general del pasivo total y capital contable
- El pasivo total y el capital contable en conjunto muestran una tendencia decreciente a partir de 2013 con un valor de 105,676 millones, alcanzando 34,622 millones en 2018. Esto refleja una reducción significativa en la estructura patrimonial, principalmente motivada por disminuciones en pasivos y deterioro del patrimonio neto, asociado probablemente a pérdidas acumuladas y a cambios en la estructura de financiamiento.