AmerisourceBergen Corp. (NYSE:ABC)

Coeficiente de liquidez corriente

Este ratio muestra una tendencia de ligera recuperación en los primeros años, con un aumento progresivo desde 0.91 en 2017 hasta un máximo de 0.98 en 2020, indicando una mejora en la capacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones a corto plazo. Sin embargo, en 2021 y 2022, el coeficiente muestra una disminución hasta 0.94 y 0.91 respectivamente, acercándose a los niveles iniciales, lo que podría reflejar una estabilización, una ligera reducción en la disponibilidad de activos líquidos o un aumento en las deudas a corto plazo.

Ratio de liquidez rápido

Este ratio, que excluye inventarios del cálculo, sigue una tendencia similar al ratios de liquidez corriente, alcanzando un pico de 0.54 en 2020. Después de ese año, se mantiene estable en 0.50 durante 2021 y 2022, sugiriendo una consistencia en la capacidad de la empresa para cubrir pasivos a corto plazo con activos altamente líquidos, aunque en niveles ligeramente inferiores al máximo alcanzado en 2020.

Ratio de liquidez en efectivo

Este ratio presenta mayor volatilidad y evidencia un comportamiento fluctuante. Se observa un aumento significativo en 2019, alcanzando 0.11, lo que indica una mayor proporción de efectivo frente a pasivos a corto plazo. En 2020, este ratio se eleva aún más a 0.14, reforzando la percepción de una mayor disponibilidad de efectivo líquido. Sin embargo, en 2021, el ratio cae abruptamente a 0.06, sugiriendo una reducción sustancial en efectivo en relación con pasivos a corto plazo. En 2022, se recupera a 0.08, pero todavía por debajo del nivel registrado en 2019 y 2020.

En conjunto, estos ratios reflejan una tendencia general de estabilidad en la liquidez a corto plazo, con una ligera recuperación en los primeros años, seguida por una estabilización y pequeños descensos en los niveles más recientes. La variabilidad en el ratio de liquidez en efectivo indica una posible gestión de efectivo más dinámica o cambios en la estructura de activos líquidos de la empresa durante los años analizados.

Activo circulante

Se observa una tendencia de crecimiento sostenido en el activo circulante a lo largo del período analizado, iniciando en aproximadamente 24.3 mil millones de dólares en 2017 y alcanzando cerca de 39.6 mil millones en 2022. Este incremento constante indica una expansión en los recursos líquidos y en los activos que pueden cubrir obligaciones a corto plazo.

Pasivo corriente

El pasivo corriente también presenta una tendencia de aumento durante el mismo período, comenzando en aproximadamente 26.8 mil millones en 2017 y llegando a cerca de 43.5 mil millones en 2022. La progresión continua refleja un incremento en las deudas u obligaciones que deben ser saldadas en el corto plazo, con una tasa de crecimiento que en algunos años puede ser mayor que la del activo circulante.

Coeficiente de liquidez corriente

Este ratio ha presentado cierta fluctuación, manteniéndose alrededor de 0.91 a 0.95 en la mayoría de los años, con un valor máximo de 0.98 en 2020. La tendencia general indica una ligera disminución hacia el final del período, bajando nuevamente a 0.91 en 2022. Un ratio cercano a 1 sugiere una posición de liquidez relativamente equilibrada, aunque en algunos años menor a 1, lo cual puede indicar una ligera tensión en la capacidad de cubrir pasivos a corto plazo con los activos circulantes.

Resumen general de los datos financieros analizados

En el análisis de los datos financieros se observa una tendencia creciente en los activos rápidos, los cuales aumentaron progresivamente desde aproximadamente 12,7 millones de dólares en 2017 hasta aproximadamente 21,8 millones de dólares en 2022. Este incremento indica una expansión en los activos altamente líquidos de la empresa, lo que podría reflejar una mejora en la gestión de efectivo y equivalentes de efectivo, o un aumento en las cuentas por cobrar y otros activos rápidos.

Por otro lado, el pasivo corriente presenta también una tendencia al alza, creciendo de manera sostenida desde cerca de 26,8 millones de dólares en 2017 a aproximadamente 43,5 millones en 2022. Este incremento en los pasivos a corto plazo refleja un aumento en las obligaciones financieras y puede estar asociado con una política de financiamiento más activa o con mayores necesidades de liquidez inmediata.

En relación con el ratio de liquidez rápido, se observa una estabilidad relativa en torno a 0.47 a 0.54 durante el período analizado. Aunque en los años iniciales aproximadamente en 2017 y 2018 el ratio estuvo en torno a 0.47-0.5, en los años posteriores presenta una tendencia leve a la estabilización en valores cercanos a 0.5. Esta estabilidad sugiere que, a pesar del incremento en activos y pasivos circulantes, la proporción de activos líquidos respecto de los pasivos corrientes se ha mantenido constante, lo cual puede indicar una gestión equilibrada de la liquidez en la organización.

Activos totales en efectivo

Se observa un incremento sostenido en los activos totales en efectivo desde 2017 hasta 2021, alcanzando un máximo en 2020. Sin embargo, en 2022 se presenta una reducción respecto al año anterior, aunque aún mantiene niveles significativamente superiores a los de 2017 y 2018, lo que indica una tendencia de aumento en la liquidez en efectivo en el periodo evaluado.

Pasivo corriente

El pasivo corriente ha experimentado un aumento constante a lo largo de los años, duplicándose aproximadamente desde 2017 hasta 2022. Este incremento sugiere que la empresa ha incrementado sus obligaciones a corto plazo en un período prolongado, lo cual puede reflejar una estrategia de financiación o una expansión en sus operaciones que requiere mayores recursos a corto plazo.

Ratio de liquidez en efectivo

El ratio de liquidez en efectivo muestra fluctuaciones a lo largo del tiempo, con valores típicamente bajos en torno a 0.09 y 0.11 en 2017 y 2019. En 2020, se evidencia un incremento a 0.14, indicando una mejora en la capacidad de cubrir pasivos corrientes con efectivo. Sin embargo, en 2021, el ratio cae notablemente a 0.06, lo que puede señalar una disminución en la disponibilidad de efectivo relativa a los pasivos a corto plazo, para volver a incrementarse a 0.08 en 2022. Estos cambios sugieren variaciones en la gestión de efectivo y en la estructura del pasivo corriente a lo largo de los años.