Applied Materials Inc. (NASDAQ:AMAT)

El análisis de los datos revela tendencias diferenciadas en los indicadores de liquidez a lo largo del período examinado.

Coeficiente de Liquidez Corriente

Se observa una tendencia general al alza desde el primer período hasta el cuarto trimestre de 2021, pasando de 2.36 a 3.17. Posteriormente, se registra un descenso hasta 2.29 en el primer trimestre de 2022, seguido de una estabilización y ligeras fluctuaciones entre 2.16 y 2.86 hasta el último período analizado. El valor final de 2.5 indica una ligera disminución respecto al pico alcanzado en 2021.

Ratio de Liquidez Rápida

Este ratio muestra un comportamiento similar al coeficiente de liquidez corriente en la primera parte del período, con un incremento desde 1.45 hasta 2.15. A partir del segundo trimestre de 2021, se aprecia una disminución más pronunciada, alcanzando un mínimo de 1.17 en el primer trimestre de 2023. Posteriormente, se observa una recuperación parcial, llegando a 1.95 en el tercer trimestre de 2024, aunque con una ligera disminución en los últimos períodos, situándose en 1.62 al final del análisis.

Ratio de Liquidez en Efectivo

El ratio de liquidez en efectivo presenta una mayor volatilidad. Inicialmente, experimenta un crecimiento hasta 1.47, seguido de un descenso significativo hasta 0.35 en el primer trimestre de 2023. A partir de este punto, se registra una recuperación progresiva, alcanzando un máximo de 1.26 en el tercer trimestre de 2024, para luego disminuir ligeramente a 0.89 en el último período. Este ratio es consistentemente el más bajo de los tres indicadores de liquidez analizados.

En resumen, se identifica una tendencia general a la disminución de la liquidez a corto plazo a lo largo del período, especialmente en lo que respecta a la capacidad de cubrir obligaciones con activos líquidos inmediatos. Si bien se observan recuperaciones parciales en algunos períodos, la tendencia general sugiere una menor flexibilidad financiera en los últimos trimestres analizados.

El análisis de los datos revela una tendencia general al alza en el activo circulante a lo largo del período observado. Se identifica un crecimiento constante desde el primer trimestre de 2020 hasta el último trimestre de 2024, con fluctuaciones menores. El activo circulante experimenta un incremento significativo entre el primer y segundo trimestre de 2020, seguido de una estabilización y posterior crecimiento sostenido.

En cuanto al pasivo corriente, se observa una dinámica similar de crecimiento, aunque con mayor volatilidad. El pasivo corriente muestra un aumento notable en el cuarto trimestre de 2021, seguido de una disminución y un nuevo incremento en el primer trimestre de 2022. A partir de ese momento, se mantiene en un rango relativamente alto, con fluctuaciones trimestrales.

Coeficiente de Liquidez Corriente

El coeficiente de liquidez corriente presenta una tendencia decreciente general a lo largo del período. Inicialmente, se mantiene en niveles superiores a 2.3, indicando una buena capacidad para cubrir las obligaciones a corto plazo con activos líquidos. Sin embargo, se observa una disminución gradual, especialmente a partir del segundo trimestre de 2021, llegando a valores cercanos a 2.1 en algunos trimestres. A finales de 2023 y principios de 2024, se aprecia una ligera recuperación, superando nuevamente el valor de 2.6. El último dato disponible muestra una disminución a 2.5.

La relación entre el activo circulante y el pasivo corriente, reflejada en el coeficiente de liquidez corriente, sugiere una disminución en la capacidad de la entidad para hacer frente a sus obligaciones a corto plazo con activos líquidos. No obstante, el coeficiente se mantiene por encima de 1 en todo momento, lo que indica que la entidad, en general, posee suficientes activos circulantes para cubrir sus pasivos corrientes. La volatilidad del pasivo corriente impacta directamente en las fluctuaciones del coeficiente, generando periodos de mayor y menor liquidez.

En resumen, se identifica un crecimiento sostenido del activo circulante, un aumento más volátil del pasivo corriente y una tendencia decreciente del coeficiente de liquidez corriente, aunque este último se mantiene en niveles aceptables durante todo el período analizado.

El análisis de los datos revela tendencias significativas en la composición del balance. Se observa un incremento general en el total de activos rápidos a lo largo del período analizado, con fluctuaciones trimestrales. Inicialmente, se registra un aumento desde 6639 hasta 8701 unidades monetarias, seguido de un pico en 9668 y una posterior estabilización alrededor de los 10000 unidades monetarias. A partir del último trimestre de 2022, se aprecia una aceleración en el crecimiento, superando las 14000 unidades monetarias en el último período registrado.

En cuanto al pasivo corriente, se identifica una tendencia ascendente más constante. El pasivo corriente experimenta un crecimiento desde 4569 hasta 6344 unidades monetarias en los primeros trimestres, y continúa aumentando hasta alcanzar un máximo de 8468 unidades monetarias. Posteriormente, se observa una ligera disminución, aunque se mantiene en niveles elevados.

Ratio de liquidez rápida

El ratio de liquidez rápida muestra una evolución variable. Inicialmente, se observa una mejora, pasando de 1.45 a 2.15. Posteriormente, el ratio experimenta una disminución, alcanzando un mínimo de 1.17. A partir de ese punto, se registra una recuperación, superando los valores iniciales y alcanzando un máximo de 1.95. En los últimos trimestres, el ratio se mantiene relativamente estable, con fluctuaciones menores.

La relación entre el crecimiento de los activos rápidos y el pasivo corriente influye directamente en el ratio de liquidez rápida. El aumento sostenido del pasivo corriente, combinado con las fluctuaciones en los activos rápidos, explica la volatilidad observada en el ratio. A pesar de las fluctuaciones, el ratio se mantiene generalmente por encima de 1, lo que indica una capacidad para cubrir las obligaciones a corto plazo con activos líquidos. Sin embargo, la disminución del ratio en ciertos períodos sugiere una posible reducción en la capacidad de respuesta ante obligaciones inmediatas.

En resumen, se identifica una expansión general en la magnitud de los activos rápidos y el pasivo corriente, con un impacto variable en el ratio de liquidez rápida. La evolución del ratio sugiere una gestión dinámica de la liquidez, con períodos de mejora y deterioro, pero manteniendo una capacidad general para cumplir con las obligaciones a corto plazo.

El análisis de los datos revela tendencias significativas en la gestión de activos y pasivos corrientes a lo largo del período examinado.

Activos totales en efectivo

Se observa una fluctuación considerable en los activos totales en efectivo. Inicialmente, se registra un aumento desde enero de 2020 hasta enero de 2021, alcanzando un máximo. Posteriormente, se aprecia una disminución gradual hasta julio de 2022, seguida de un repunte en octubre de 2022 y un crecimiento sostenido hasta julio de 2024. A partir de este punto, se identifica una tendencia a la baja, aunque con cierta volatilidad, hasta julio de 2025.

Pasivo corriente

El pasivo corriente muestra una tendencia general al alza durante la mayor parte del período. Se observa un incremento constante desde enero de 2020 hasta octubre de 2022. A partir de este momento, se registra una disminución en enero de 2023, seguida de un nuevo aumento hasta abril de 2023. Posteriormente, se aprecia una reducción en julio de 2023 y una estabilización relativa hasta octubre de 2024, con un incremento final en los períodos más recientes.

Ratio de liquidez en efectivo

El ratio de liquidez en efectivo presenta una evolución variable. Inicialmente, se observa una mejora desde enero de 2020 hasta enero de 2021, indicando una mayor capacidad para cubrir las obligaciones corrientes con activos en efectivo. Sin embargo, a partir de mayo de 2021, se registra una disminución constante hasta julio de 2022, reflejando una menor liquidez. Posteriormente, el ratio experimenta una recuperación parcial hasta abril de 2024, seguido de una ligera disminución en los últimos períodos analizados. En general, el ratio fluctúa entre 0.35 y 1.47, lo que sugiere variaciones en la capacidad de la entidad para hacer frente a sus obligaciones a corto plazo.

En resumen, la entidad ha experimentado cambios significativos en sus niveles de efectivo y pasivo corriente, lo que ha impactado en su ratio de liquidez en efectivo. La gestión de la liquidez parece haber sido más sólida en los primeros períodos del análisis, pero se ha vuelto más variable en los últimos trimestres.