Estructura del balance: activo
Datos trimestrales
Basado en los informes: 10-Q (Fecha del informe: 2020-06-27), 10-Q (Fecha del informe: 2020-03-28), 10-K (Fecha del informe: 2019-12-28), 10-Q (Fecha del informe: 2019-09-28), 10-Q (Fecha del informe: 2019-06-29), 10-Q (Fecha del informe: 2019-03-30), 10-K (Fecha del informe: 2018-12-29), 10-Q (Fecha del informe: 2018-09-29), 10-Q (Fecha del informe: 2018-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2018-03-31), 10-K (Fecha del informe: 2017-12-30), 10-Q (Fecha del informe: 2017-09-30), 10-Q (Fecha del informe: 2017-07-01), 10-Q (Fecha del informe: 2017-04-01), 10-K (Fecha del informe: 2016-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2016-10-02), 10-Q (Fecha del informe: 2016-07-03), 10-Q (Fecha del informe: 2016-04-03), 10-K (Fecha del informe: 2015-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2015-09-27), 10-Q (Fecha del informe: 2015-06-28), S-4/A (Fecha del informe: 2015-03-29).
- Distribución de activos y tendencias generales
- Se observa una alta concentración de activos en la categoría de activos no corrientes, manteniéndose en torno al 87% a 92% del total de activos a lo largo del período analizado. Es destacable que en ciertos períodos, particularmente en el segundo trimestre de 2018, la proporción de activos no corrientes alcanza un valor cercano al 93.66%, indicando una fuerte inversión en activos a largo plazo. Por otro lado, los activos corrientes representan una proporción variable, fluctuando entre aproximadamente 7.27% y 12.73%, con una tendencia general a mantenerse por debajo del 13%, lo que sugiere una estructura de activos orientada hacia inversiones a largo plazo y menor rotación de activos circulantes.
- Composición y evolución del efectivo y equivalentes
- El efectivo y equivalentes muestran una tendencia general al aumento desde niveles por debajo del 2.86% en 2018 a un pico en marzo de 2020 con un 5.19%. Aunque en algunos trimestres se observa una reducción (por ejemplo, en 2017 y 2018), la tendencia hacia 2020 indica mayor liquidez en momentos específicos, posiblemente reflejando estrategias de gestión de liquidez ante eventos económicos relevantes o cambios en las necesidades de efectivo.
- Cuentas por cobrar
- Las cuentas por cobrar comerciales de manera consistente constituyen alrededor del 0.7% a 2.23% del total de activos, con una tendencia a la estabilización después de picos no muy significativos. La categoría de cuentas por cobrar vendidas se registra ampliamente en ciertos períodos (principalmente en 2016 y 2017), alcanzando valores cercanos a 0.65%, luego desaparece en los períodos posteriores, lo que puede indicar cambios en las políticas de factoring o en la venta de créditos comerciales.
- Inventarios y otros activos corrientes
- Los inventarios fluctúan en un rango cercano al 2% a 3%, con una leve tendencia al aumento en los trimestres finales, sugiriendo una posible acumulación o gestión de inventarios para mantener niveles adecuados de stock. Otros activos corrientes tienen un comportamiento variable pero sin cambios relevantes en su proporción; destacan picos en 2017 y 2018, indicando cambios en activos como prepagos u otros activos corrientes no clasificados previamente.
- Activo circulante
- El porcentaje de activo circulante muestra una tendencia variable, con valores bajos en 2015 y 2016, pero un aumento en 2018 y 2019, alcanzando aproximadamente un 8.88%. Esto refleja una fluctuación en la gestión de los activos de corto plazo, con periodos donde la proporción aumenta, posiblemente como respuesta a necesidades temporales de liquidez o cambios en el ciclo operativo.
- Activo fijo y activos intangibles
- El inmovilizado material se mantiene relativamente estable, alrededor del 6.2% a 6.9%, indicando una política estable en inversión de activos fijos a largo plazo. Los activos intangibles, en cambio, representan cerca del 46% al 50% del total de activos, con ligeras variaciones, y muestran una tendencia a mantenerse en niveles elevados, lo que conlleva que los activos intangibles constituyen una parte significativa del valor en libros, reflejando posiblemente inversión en marca, patentes u otros intangibles.\nTambién se observa una ligera disminución en activos intangibles en 2019 y 2020, señalando potenciales amortizaciones o reevaluaciones.
- Otros activos no corrientes y buenas voluntades
- Otros activos no corrientes se mantienen en niveles inferiores, entre 1.2% y 2.28%, con una ligera tendencia al incremento al final del período analizado. La buena voluntad fluctúa entre aproximadamente 33.69% y 40.88%, con tendencia a estabilizarse en torno a 34%-37%, indicando una valoración constante de la plusvalía adquirida, en línea con las adquisiciones y revalorizaciones de activos intangibles.
- Resumen de tendencias
- En conjunto, la estructura de activos revela una fuerte preferencia por activos no corrientes, con cambios moderados en la composición de activos corrientes y efectivos. La tendencia hacia mayor liquidez en ciertos períodos, especialmente en 2020, puede estar relacionada con estrategias de gestión de riesgos y respuesta a condiciones económicas. La significativa presencia de activos intangibles y la estabilidad en la inversión en activos fijos reflejan un enfoque sostenido en activos a largo plazo y valor de marca, que puede ser relevante para la generación futura de ingresos. La fluctuación en los componentes de activos corrientes y la variabilidad en algunos elementos específicos (como cuentas por cobrar vendidas) sugieren ajustes operativos y estratégicos en la gestión del capital de trabajo durante los diferentes trimestres analizados.