Estée Lauder Cos. Inc. (NYSE:EL)

Coeficiente de liquidez corriente

El ratio de liquidez corriente exhibe una tendencia general de estabilidad con cierta fluctuación. Durante el período analizado, inicia en 1.75 y presenta un ligero incremento hasta llegar a 2.12 en marzo de 2021, alcanzando su valor máximo en ese momento. Posteriormente, experimenta una disminución sostenida en los últimos períodos, finalizando en 1.46 en junio de 2023. La tendencia sugiere una mayor disponibilidad de activos corrientes en los años intermedios, seguida por una reducción en la liquidez en los períodos más recientes, lo cual puede indicar un ajuste en la gestión de los recursos a corto plazo.

Ratio de liquidez rápido

Este ratio, que excluye inventarios para evaluar de manera más estricta la capacidad de pago a corto plazo, muestra una tendencia de incremento en los primeros años, alcanzando un valor máximo de 1.57 en marzo de 2021. Después, se observa una tendencia decreciente, descendiendo a 0.88 en junio de 2023. A lo largo del período, el ratio ha variado, pero en general indica una disminución en la capacidad de cubrir obligaciones inmediatas sin depender de la liquidación de inventarios, especialmente en la última fase del análisis.

Ratio de liquidez en efectivo

El ratio en efectivo revela una tendencia de aumento en los primeros años, llegando a su punto más alto en diciembre de 2020 con un valor de 1.02. Posteriormente, experimenta una disminución, estabilizándose en valores cercanos a 0.65 en 2023. Este comportamiento puede reflejar una gestión de efectivo que prioriza la acumulación en determinados períodos, seguida de una disminución en la disponibilidad de efectivo en los períodos más recientes, posiblemente por mayores desembolsos o cambios en la estrategia de liquidez.

El análisis de los datos financieros trimestrales revela varias tendencias relevantes respecto a la posición de liquidez y los niveles de activos y pasivos circulantes de la empresa en el período considerado.

Activos circulantes

Se observa una tendencia general de incremento en los activos circulantes a lo largo de los trimestres, pasando de aproximadamente US$ 5,507 millones en septiembre de 2017 a un pico de US$ 11,247 millones en marzo de 2023. Esto indica una expansión en los recursos líquidos y en los bienes a corto plazo, lo que puede reflejar una estrategia receptiva a oportunidades de inversión o un aumento en la eficiencia en la gestión de inventarios, cuentas por cobrar y efectivo.

Pasivos corrientes

Los pasivos corrientes muestran fluctuaciones, con un incremento notable en los últimos períodos. Desde aproximadamente US$ 3,142 millones en septiembre de 2017, levantan a un máximo de US$ 7,700 millones en marzo de 2023. La tendencia indica un aumento en las obligaciones a corto plazo, aunque con algunos períodos de estabilización o descenso relativo, lo cual requiere monitoreo para evaluar adecuadamente el nivel de apalancamiento y la gestión de esa deuda.

Coeficiente de liquidez corriente

El ratio de liquidez corriente presenta una tendencia general de aumento en los primeros años, alcanzando un máximo de 2.12 en marzo de 2021, antes de disminuir a niveles de 1.46 en 2023. La variación indica que inicialmente la empresa mejoró su capacidad para cubrir obligaciones a corto plazo con activos líquidos, pero en los períodos más recientes, esa capacidad se ha reducido, lo que podría reflejar una gestión de activos o pasivos con menor margen de seguridad, o ciclos de ajuste en la estrategia financiera.

En conclusión, la empresa ha incrementado de manera significativa sus activos circulantes a lo largo del período analizado, acompañada por un aumento en pasivos corrientes, lo que ha afectado inicialmente favorablemente su ratio de liquidez. Sin embargo, en los últimos trimestres se evidencia una reducción en dicho cociente, lo que indica una posible tendencia a una menor holgura en la cobertura de obligaciones a corto plazo, y requiere atención en la gestión financiera para mantener niveles adecuados de liquidez.

Descripción general de la tendencia en los activos rápidos

Los activos rápidos exhiben un crecimiento general a lo largo del período analizado, iniciando en aproximadamente 3,624 millones de dólares a finales de septiembre de 2017 y alcanzando un máximo de 8,134 millones en marzo de 2021. Después de alcanzar este pico, se observa una tendencia a la estabilización con ligeras fluctuaciones, ubicándose en torno a 5,481 millones en junio de 2023. Este patrón indica que la empresa ha incrementado sus activos líquidos en los últimos años, aunque con una caída significativa en el último período, lo que puede reflejar cambios en la gestión de inventarios, cuentas por cobrar u otros activos denominados como rápidos.

Análisis del pasivo corriente

El pasivo corriente presenta una tendencia de crecimiento a lo largo del período, aumentado desde 3,142 millones en septiembre de 2017 hasta un pico de 7,700 millones en marzo de 2023. Se destacan períodos de incrementos sostenidos, especialmente desde 2018 hacia adelante, con algunas fluctuaciones menores. La tendencia al alza en los pasivos corrientes refleja un aumento en las obligaciones a corto plazo, lo cual puede influir en la liquidez disponible para la operación y en la gestión de pasivos a corto plazo.

Evaluación del ratio de liquidez rápida

El ratio de liquidez rápida muestra una tendencia variable a lo largo del período, con un valor inicial de 1.15 en septiembre de 2017 y alcanzando un máximo de 1.57 en marzo de 2021. Desde ese punto, se aprecia una tendencia decreciente, llegando a 0.88 en marzo de 2023, indicando una disminución en la capacidad de cubrir pasivos corrientes con activos líquidos o cercanos a ser convertidos en efectivo. La fluctuación en este ratio sugiere cambios en la composición de los activos líquidos y en la gestión del capital de trabajo, con periodos en los que la liquidez ha sido relativamente sólida y otros en los que se ha reducido, planteando posibles desafíos en la gestión de la liquidez a corto plazo.

El análisis de los datos financieros trimestrales revela varias tendencias relevantes en la situación de la empresa durante el período considerado. En primer lugar, los activos totales en efectivo muestran una tendencia general al alza, pasando de 1,825 millones de dólares en el trimestre final de 2017 a un pico de 6,399 millones en el primer trimestre de 2021, seguido de una disminución a 4,029 millones en el segundo trimestre de 2023. Esta evolución sugiere una tendencia de acumulación de efectivo en ciertos períodos, aunque con una reciente reducción, lo cual podría reflejar movimientos en la estrategia de manejo de liquidez o inversiones significativas.

En relación con el pasivo corriente, se observa una tendencia ascendente a lo largo del período. En 2017, este pasivo era de aproximadamente 3,142 millones de dólares, alcanzando un máximo de 7,700 millones en el cuarto trimestre de 2022. La creciente cifra indica un incremento en las obligaciones a corto plazo, que puede estar vinculada a financiamiento, compras a crédito u otros pasivos circulantes. La proporción de estos pasivos respecto a los activos en efectivo y otros recursos financieros es importante para entender la estructura de financiamiento y la capacidad de la empresa para afrontar sus compromisos inmediatos.

El ratio de liquidez en efectivo, que indica la capacidad de la empresa para cubrir sus pasivos corrientes con efectivo disponible, presenta fluctuaciones significativas. En ciertos períodos, como en el tercer trimestre de 2022, alcanzó valores cercanos a 1.23, sugiriendo una posición momentánea favorable respecto a la solvencia en el corto plazo. Sin embargo, en otros trimestres, como en el primer trimestre de 2020, el ratio fue tan bajo como 0.49, reflejando menor disponibilidad de efectivo en comparación con las obligaciones inmediatas. La tendencia general apunta a una recuperación del ratio a partir del fin de 2020 y durante 2021, pero con niveles que permanecen por debajo de 1 en varios períodos, lo cual puede indicar restricciones temporales en la liquidez o una estrategia de gestión de efectivo ajustada a la operación y necesidades de financiación.

En conjunto, la empresa ha mostrado una tendencia de crecimiento en sus activos en efectivo, acompañada por un aumento en los pasivos corrientes. La fluctuación en el ratio de liquidez en efectivo sugiere una gestión activa de la liquidez, con episodios de mejora y de deterioro en la capacidad de cubrir obligaciones inmediatas con efectivo disponible. La evolución de estos indicadores debe ser monitoreada cuidadosamente para evaluar la salud financiera y la flexibilidad de la organización ante cambios en el entorno económico y operacional.