Starbucks Corp. (NASDAQ:SBUX)

El ratio de rotación de inventario muestra una tendencia generalmente estable con ligeras fluctuaciones a lo largo del período analizado.

Desde un valor inicial en niveles bajos hasta alcanzado un pico cercano a 16.09 en marzo de 2021, se observa un incremento gradual en la eficiencia en la gestión de inventarios, alcanzando valores relativamente altos durante 2022 y 2023. Sin embargo, hacia 2024 y 2025, los ratios tienden a estabilizarse en niveles ligeramente inferiores o similares. La variabilidad en estos ratios indica ajustes en la gestión de inventarios en respuesta a condiciones operativas o de mercado.

El índice de rotación de cuentas por cobrar presenta una tendencia de mejora en la rapidez con la que la empresa cobra a sus clientes.

Los valores fluctúan en un rango comprensible entre aproximadamente 26 y 32, con picos en algunos períodos como marzo de 2022 y 2023, evidenciando una gestión relativamente eficiente de cobros, especialmente durante 2021 y 2022. La tendencia indica una posible optimización en la recaudación, aunque con cierta variabilidad que podría estar relacionada con políticas comerciales, temporada o condiciones de mercado.

El ratio de rotación de cuentas por pagar presenta una tendencia ascendente desde niveles iniciales de aproximadamente 15 a picos superiores a 21, mostrando un incremento en la duración del ciclo de pago.

Este patrón puede indicar una estrategia de gestión de pagos más flexible o una estrategia para mantener liquidez, así como cambios en las negociaciones con proveedores. Posteriormente, los valores tienden a estabilizarse en rangos cercanos a 16-18, sugiriendo una estabilización en las políticas de pago.

El ratio de rotación del capital circulante muestra variabilidad, con un valor extraordinariamente alto en marzo de 2020, alcanzando 205.59, seguido de una caída significativa.

Este pico puede estar asociado a eventos específicos en ese período, como ajustes ante la emergencia global por la pandemia de COVID-19, que impactaron las operaciones y la gestión de fondos circulantes. La estabilización posterior indica una normalización en el uso del capital circulante.

En cuanto a los días de rotación, la instrucción temporal indica que el ciclo operativo y de inventarios se mantiene en rangos estrechos, con algunos picos en 2021 y 2022.

La rotación de inventario oscila entre 23 y 33 días, mientras que las cuentas por cobrar generalmente se mantienen en torno a 11-14 días, reflejando una gestión eficiente en el cobro y almacenamiento del inventario.

Los días de rotación de cuentas por pagar muestran una tendencia de disminución desde niveles cercanos a 26 días en 2024 a valores más bajos en períodos anteriores, sugiriendo una optimización en el ciclo de pagos.

En algunos períodos, los días de pago caen por debajo de las 20 jornadas, indicando posibles iniciativas para mejorar la liquidez y reducir el ciclo de operación en cuanto a pagos pendientes.

El ciclo de funcionamiento, que combina rotaciones de inventario, cobro y pago, presenta una tendencia a disminuir con respecto a 2018, alcanzando valores entre 35 y 41 días en la mayoría de los períodos considerados.

Esto refleja una mejora en la eficiencia operativa y en la gestión de liquidaciones de operaciones, especialmente en períodos posteriores a 2020, posiblemente en respuesta a la crisis global.

El ciclo de conversión de efectivo, que mide el tiempo en días que tarda la empresa en convertir sus inversiones en inventarios, cuentas por cobrar y pagar en efectivo, también indica una reducción paulatina en su duración, alcanzando valores cercanos a 13-16 días al final del período.

Este comportamiento sugiere una mayor eficiencia en la gestión del efectivo, permitiendo una rotación más rápida del mismo y una mejor utilización de los recursos líquidos.

Resumen de tendencias en costos de ingresos

El costo de los ingresos muestra una tendencia general al alza a lo largo del período analizado, pasando de aproximadamente 4,75 miles de millones de dólares en diciembre de 2018 a alrededor de 7,09 miles de millones en junio de 2025. Aunque existen fluctuaciones en algunos trimestres, la tendencia indica un incremento sostenido en los costos, reflejando posibles expansiones en operaciones, aumentos en precios de insumos o mayor volumen de ventas.

Resumen de tendencias en inventarios

Los inventarios presentan un crecimiento constante desde aproximadamente 1,35 millones de dólares en diciembre de 2018 hasta alcanzar un pico cercano a 2,25 millones en marzo de 2024. Se observa un patrón de aumento progresivo, con algunos períodos de estabilización o ligera disminución temporal, pero en general la tendencia es a la expansión de los inventarios. Esto puede estar asociado a estrategias de aumento de la capacidad de almacenamiento o a un incremento en las compras para soportar mayores niveles de ventas proyectadas.

Resumen del ratio de rotación de inventario

El ratio de rotación de inventario inicia en valores no reportados en las primeras fechas y muestra una tendencia ascendente desde aproximadamente 10.97 en abril de 2022 hasta un máximo de 16.09 en marzo de 2024. Este aumento indica una mayor eficiencia en la gestión del inventario, sugiriendo que la empresa está logrando vender y reponer inventarios de manera más rápida con el tiempo. La variabilidad en los ratios a lo largo de los trimestres refleja esfuerzos por optimizar el inventario y reducir plazos de inventario en caja, aunque en algunos períodos se mantiene relativamente estable o en ligera disminución.

Observaciones generales

Se evidencian patrones de incremento tanto en costos de ingresos como en niveles de inventario, con un aumento progresivo en la eficiencia de rotación de inventarios en trimestres recientes. La tendencia de incrementos en costos y inventarios puede estar alineada a esfuerzos de expansión o crecimiento de la actividad operativa, mientras que la mejora en la rotación de inventarios indica posibles mejores prácticas de gestión y optimización de la cadena de suministro en los períodos más recientes.

Ingresos netos

La serie de ingresos netos muestra una tendencia general de crecimiento a lo largo de los períodos analizados, aunque con algunas fluctuaciones significativas. Después de un período de disminución en el primer trimestre de 2020, posiblemente atribuible a impactos económicos de eventos extraordinarios, se observa una recuperación sólida en los trimestres siguientes.

Entre el cuarto trimestre de 2019 y el primer trimestre de 2021, los ingresos volvieron a crecer consistentemente, alcanzando niveles máximos en los últimos períodos reportados, con valores cercanos o ligeramente superiores a los 9 millones de dólares en miles. Sin embargo, en los trimestres más recientes, específicamente en 2024, los ingresos parecen estabilizarse en niveles cercanos a los 9 millones de dólares, mostrando una tendencia de maduración o estabilización de los resultados económicos.

Cuentas por cobrar, netas

El saldo de cuentas por cobrar mantiene una tendencia de incremento a lo largo del período, evidenciando un aumento paulatino en la cantidad de créditos concedidos o en la demora en la recuperación de estos. La cifra pasa de aproximadamente 721 millones en diciembre 2018 a más de 1.245 millones en junio de 2025, reflejando posiblemente una expansión en las operaciones o cambios en las políticas de crédito.

Las fluctuaciones en los valores no parecen seguir un patrón estacional definido, aunque la tendencia de fondo es de crecimiento sostenido en los saldos pendientes por cobrar. La mayor parte del período también muestra una ligera estabilización en ciertos trimestres, pero sin revertir la tendencia al aumento a largo plazo.

Índice de rotación de cuentas por cobrar

El índice de rotación de cuentas por cobrar presenta un comportamiento relativamente estable, con valores que oscilan entre aproximadamente 26 y cerca de 32. La tendencia promedio sugiere una ligera mejora en la eficiencia para cobrar las cuentas, ya que los valores tienden a incrementarse tras ciertos períodos del 2020 y 2021.

Valores en torno a 30 indican que, en promedio, la empresa logra cobrar sus cuentas aproximadamente cada mes o un poco más, lo que denota una gestión eficiente en la rotación de cuentas por cobrar, aunque con una ligera variabilidad a lo largo del tiempo.

El análisis de los datos financieros trimestrales revela varias tendencias relevantes en las cuentas a pagar y en su rotación, además del comportamiento del costo de los ingresos durante el período de 2018 a 2025.

Cuentas a pagar

- Los valores de cuentas a pagar presentan una tendencia creciente a lo largo del período, pasando de aproximadamente US$ 1,1 millones en diciembre de 2018 a más de US$ 1,9 millones en marzo de 2025.

- Durante 2019, se observa una estabilización en la cuantía, con algunos aumentos en el primer trimestre y una tendencia a mantenerse relativamente alta durante la segunda mitad del año.

- En 2020, a pesar de la pandemia, las cuentas a pagar continúan en niveles similares, con incrementos notables en algunos trimestres. Posteriormente, en 2021 y 2022, la tendencia es de incremento sostenido, alcanzando valores cercanos a US$ 1,58 millones en diciembre de 2022 y superando esa cifra en 2023.

- A partir de esos niveles, los valores se mantienen con cierta estabilidad, con ligeras variaciones, reflejando tal vez una gestión consistente en la liquidación de obligaciones a corto plazo.

Ratio de rotación de cuentas por pagar

- Este ratio muestra fluctuaciones que oscilan entre aproximadamente 14.25 y 21.71, indicando cambios en la velocidad con la que la empresa está liquidando sus cuentas pendientes.

- La tendencia general es de alta rotación en 2019 y 2020, llegando a valores cercanos a 21.71 en septiembre de 2019 y en el primer trimestre de 2020, sugiriendo pagos relativamente ágiles en esos períodos.

- Sin embargo, a partir de 2021, el ratio muestra una tendencia a disminuir, alcanzando valores por debajo de 17 en algunos trimestres, lo que podría indicar una extensión de los plazos de pago o una gestión más prudente de la liquidez.

- La disminución en el ratio en 2023 y 2024 señala un posible incremento en las periodos de pagos, aunque los niveles siguen reflejando una rotación adecuada, dado que no caen por debajo de niveles críticos.

Costo de los ingresos

- El costo de los ingresos muestra un incremento constante a lo largo del período, pasando de aproximadamente US$ 4.75 millones en diciembre de 2018 a cerca de US$ 7.3 millones en junio de 2025.

- Durante 2019, 2020 y 2021, el crecimiento es paulatino, aunque se observan picos y leves estabilizaciones, que podrían estar asociados a cambios en la producción, precios o condiciones de mercado.

- A partir de 2022, el incremento se mantiene firme, indicando posiblemente aumento en los volúmenes de producción, en los costos de insumos o en estrategias de expansión.

En conclusión, los datos reflejan una tendencia a un aumento tanto en las cuentas a pagar como en el costo de los ingresos, con fluctuaciones en la rotación de cuentas pendientes que sugieren ajustes en la política de pagos y gestión del capital de trabajo. La estabilidad relativa en niveles de cuentas a pagar, junto con una rotación moderada, apunta a una administración equilibrada del ciclo de pagos y cobros, en un contexto de crecimiento sostenido de los costos asociados a la operación.

Patrón de variación del capital de explotación

El capital de explotación presenta una tendencia altamente volátil en el período analizado. Entre diciembre de 2018 y marzo de 2019, se observa una caída significativa, pasando de un valor positivo a negativo, lo que sugiere alteraciones fuertes en la estructura del capital. Posteriormente, en junio de 2019, se recupera a niveles positivos, alcanzando un pico en diciembre de 2019. Sin embargo, a partir de marzo de 2020, se registrada una caída profunda, alcanzando valores negativos sustanciales en los períodos siguientes. En los últimos años, el capital de explotación se muestra estabilizado en niveles negativos, con episodios de incrementos y decrecimientos, pero sin volver a valores positivos, indicando posiblemente problemas persistentes en la generación de recursos suficientes para soportar las operaciones.

Comportamiento de los ingresos netos

Los ingresos netos muestran un crecimiento sostenido durante todo el período, con aumentos trimestre tras trimestre, a pesar de picos y valles. Desde diciembre de 2018, los ingresos fluctúan alrededor de los 6,6 y 7 millones de dólares, alcanzando máximos cercanos a 9 millones de dólares en los últimos períodos analizados. La tendencia general indica expansión en la generación de ingresos, con incrementos continuos en la mayoría de los trimestres, lo que puede reflejar mejoras en las ventas o cambios en la estrategia comercial. Sin embargo, no se observan caídas significativas que pongan en duda la tendencia positiva de los ingresos.

Ratio de rotación del capital circulante

El ratio de rotación del capital circulante presenta una tendencia irregular. En algunos períodos, como en diciembre de 2020, alcanza valores extremadamente elevados (51.17 y 48.92), lo que indica una alta eficiencia en el uso del capital circulante, posiblemente debido a un incremento en las ventas respecto al capital disponible. Sin embargo, en varios períodos posteriores, no se dispone de datos, pero su comportamiento en los puntos en los que sí se presenta evidencia sugiere fluctuaciones significativas, reflejando cambios en la gestión del capital de trabajo, posiblemente motivados por estrategias de inventario, cobros o pagos a proveedores. La variabilidad en estos ratios puede estar asociada a cambios en la política de gestión financiera o a las condiciones de mercado.

Resumen general

La empresa muestra una tendencia de incremento en ingresos netos con cierta estabilidad en su crecimiento a largo plazo, aunque enfrenta desafíos en el mantenimiento de un capital de explotación positivo y estable. La variabilidad en el ratio de rotación del capital circulante indica fluctuaciones en la eficiencia en la gestión del capital de trabajo. La combinación de aumentos en ingresos y la irregularidad en la estructura de capital podría reflejar una estrategia de expansión o adaptación a condiciones de mercado variables, acompañada por períodos de dificultad en la generación de recursos propios para sostener las operaciones.

Ratio de rotación de inventario

El ratio de rotación de inventario muestra una tendencia general a la alza desde el tercer trimestre de 2019 hasta el cuarto trimestre de 2023, indicando una mejora en la eficiencia para vender y reponer inventarios. Los valores aumentan desde niveles cercanos a 12.44 en diciembre de 2018 hasta alcanzar picos cercanos a 16.09 en marzo de 2023. Se observa que durante 2020 y 2021, tras un descenso en 2020, los ratios disminuyen ligeramente y luego retoman una tendencia alcista. La tendencia indica que la empresa ha optimizado el manejo de inventarios en un período de recuperación posterior a los efectos iniciales de la pandemia, logrando un mayor ciclo de rotación en los inventarios.

Días de rotación de inventario

Este indicador complementa al ratio de rotación y evidencia una tendencia decreciente desde aproximadamente 29 días en diciembre de 2018 a aproximadamente 23 días en marzo de 2024. La reducción en los días de rotación refleja una mayor eficiencia en la gestión del inventario, permitiendo que los productos permanezcan menos tiempo en inventario antes de su venta. Es importante notar que este indicador fluctúa ligeramente a lo largo del período, pero la tendencia general demuestra una mejoría en la gestión del inventario y un ciclo de rotación más corto con el tiempo.

Análisis del índice de rotación de cuentas por cobrar

El índice de rotación de cuentas por cobrar muestra una tendencia relativamente estable a lo largo de los períodos analizados, con fluctuaciones menores. En los primeros meses del período, particularmente en marzo y junio de 2019, se observa un valor cercano a 30, lo que indica una alta frecuencia de rotación de cuentas por cobrar. Al acercarse a finales de 2019 y durante 2020, el índice presenta ligeras variaciones, oscilando entre aproximadamente 26 y 31, sin cambios significativos en la tendencia general.

Los días de rotación de cuentas por cobrar

En cuanto a los días necesarios para cobrar las cuentas, se mantiene bastante estable, en valores aproximadamente entre 11 y 14 días durante todo el período. La consistencia en estos días sugiere una gestión de cobros eficiente y una política de crédito que no ha experimentado cambios sustanciales en el período analizado.

Observaciones generales

La estabilidad tanto en el índice como en los días de rotación indica una gestión financiera coherente en cuanto a la cobranza y el crédito concedido, manteniendo un ciclo de conversión de efectivo eficiente. La ligera fluctuación en los valores sugiere que no ha habido cambios estructurales o eventos significativos que afectaran la política crediticia o la liquidez relacionada con las cuentas por cobrar durante los períodos analizados.

Patrón en la rotación de inventario

El análisis de los días de rotación de inventario revela una tendencia hacia una disminución progresiva en el período comprendido desde mediados de 2020 hasta finales de 2023. Inicialmente, en 2018 y 2019, los días de inventario fluctuaban en rangos ligeramente superiores a 29 días. Sin embargo, desde ese momento, se observa una reducción sostenida, llegando a valores cercanos a 23-25 días en 2023. Esto indica una mejora en la eficiencia de gestión del inventario, posiblemente reflejando una optimización en la cadena de suministro o una estrategia para reducir inventario excedente.

Patrón en la rotación de cuentas por cobrar

La rotación de cuentas por cobrar se mantiene de manera relativamente estable a lo largo del período analizado. Los días oscilan entre 11 y 14 días, con una ligera tendencia a estabilizarse en torno a 12-13 días desde mediados de 2019. La consistencia en estos valores sugiere que la política de cobranza no ha experimentado cambios significativos y que la empresa mantiene una gestión eficiente en la recuperación de sus créditos por ventas.

Patrón en el ciclo de funcionamiento

El ciclo de funcionamiento muestra una tendencia a variar en torno a los 35-45 días durante la mayor parte del período. En los primeros años, el ciclo supera los 40 días, alcanzando picos de 46 días en ciertas ocasiones. Desde 2021 en adelante, el ciclo tiende a reducirse a valores cercanos a los 35 días, con algunos periodos en torno a 37 días. La disminución en el ciclo completo indica una posible mejora en la eficiencia del proceso operativo, integrando de forma más efectiva la gestión de inventarios y cuentas por cobrar.

Resumen general

En conjunto, los datos reflejan una tendencia positiva hacia una mayor eficiencia operacional. La reducción progresiva en los días de inventario, junto con la estabilidad en los días de cobranza y una ligera disminución en el ciclo de funcionamiento, sugieren que la gestión de recursos y procesos de la empresa ha mejorado en los últimos años. Estos cambios pueden estar asociados a estrategias de optimización interna, mejora en la gestión de la cadena de suministro y control de crédito, así como a esfuerzos para reducir el ciclo operativo y mejorar la liquidez.

Patrón general en la rotación de cuentas por pagar

Se observa una tendencia en el ratio de rotación de cuentas por pagar que fluctúa en torno a valores entre aproximadamente 14 y 22, sin llegar a presentar una tendencia clara de aumento o disminución sostenida. Sin embargo, en los datos más recientes, específicamente en el último trimestre, se nota una ligera disminución en el ratio, acompañada por un aumento en el número de días de rotación. Esto sugiere que la empresa ha comenzado a extender un poco más el tiempo en el pago a sus proveedores, lo cual puede reflejar cambios en la política de gestión de pagos, condiciones de crédito o estrategias financieras temporales.

Variación en los días de rotación

El número de días en el ciclo de pago oscila desde 17 hasta 26 días, con un promedio que parece mantenerse relativamente estable en torno a los 20 días. La punta más alta (26 días) se presenta en el último período, incrementándose respecto a los 17 días del segundo trimestre de 2020. Esto puede indicar mayor flexibilidad o mayor retraso en los pagos, o una estrategia intencional para mejorar la liquidez en determinados momentos.

Implications

La estabilidad en el ratio de rotación y en los días de rotación en largos períodos muestra una gestión constante en el ciclo de pago. La tendencia hacia un aumento en los días de pago en los datos recientes, aunque no muy pronunciada, puede reflejar una política de mayor extensión en los plazos con proveedores o cambios en el flujo de efectivo que incentivan un pago más tardío. Es importante monitorear esta tendencia para evaluar su impacto en las relaciones con proveedores y en las condiciones crediticias futuras.

Tendencias en días de rotación de inventario

Se observa una tendencia general hacia una menor rotación de inventario en los primeros meses del período, con días que disminuyen de valores cercanos a 31-33 días en los trimestres iniciales hasta alcanzar un mínimo de 23 días en el último trimestre considerado antes de 2024. Esto indica una posible optimización en la gestión del inventario o cambios en la demanda o en las políticas de inventario. Sin embargo, en algunos casos a partir de 2022, los días vuelven a subir ligeramente, manteniéndose en rangos de 24 a 29 días, sugiriendo una cierta estabilidad o fluctuaciones menores en la gestión de inventario.

Tendencias en días de rotación de cuentas por cobrar

Los días en cuentas por cobrar se mantienen relativamente estables a lo largo del período, con valores predominantemente en 12-14 días. La constante estabilidad en esta métrica indica una política de cobro consistente y eficiente, con tiempos de cobranza que no exhiben cambios significativos, manteniendo la liquidez en niveles previsibles.

Tendencias en días de rotación de cuentas por pagar

Se observa una tendencia a la reducción de los días de pago, que disminuyen desde valores en torno a 23 días en el primer período hasta llegar a 20-22 días en los últimos trimestres. Esto puede reflejar una tendencia a una gestión más estricta del capital de trabajo, con una preferencia por pagar a proveedores en plazos ligeramente más cortos, o cambios en las condiciones de negociación con los proveedores.

Ciclo de conversión de efectivo

El ciclo de conversión de efectivo muestra una tendencia general a la reducción, pasando de valores cercanos a 27 días en los primeros períodos a aproximadamente 13-15 días en los últimos. La disminución en el ciclo indica una mejora en la eficiencia en la gestión del efectivo, logrando convertir las inversiones en inventario y cuentas por cobrar en efectivo en menores plazos. Esta tendencia refleja una optimización en el ciclo operativo y puede estar relacionada con esfuerzos en la gestión de inventarios, cobros y pagos, para acelerar la disponibilidad de efectivo.