Análisis de cuentas por cobrar de dudoso cobro
La provisión para cuentas por cobrar de dudoso cobro (deudas incobrables) es una cuenta en contra que reduce el saldo de las cuentas por cobrar brutas de la empresa. La relación entre la provisión y el saldo de las cuentas por cobrar debe ser relativamente constante, a menos que se produzca un cambio en la economía en general o en la base de clientes.
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Provisión para cuentas por cobrar de dudoso cobro
Basado en los informes: 10-K (Fecha del informe: 2024-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2023-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2022-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2021-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2020-12-31).
1 2024 cálculo
Provisión como porcentaje de las cuentas por cobrar, brutas = 100 × Provisión para pérdidas crediticias ÷ Cuentas por cobrar, brutas
= 100 × ÷ =
El análisis de los datos financieros revela tendencias significativas en la gestión del crédito y las cuentas por cobrar a lo largo del período examinado.
- Provisión para pérdidas crediticias
- La provisión para pérdidas crediticias muestra un incremento constante desde 44 millones de dólares en 2020 hasta alcanzar los 56 millones de dólares en 2023. En 2024, se observa una ligera disminución, situándose en 52 millones de dólares. Este patrón sugiere una evaluación inicial de mayor riesgo crediticio, seguida de una estabilización.
- Cuentas por cobrar, brutas
- Las cuentas por cobrar brutas experimentaron una disminución inicial de 4936 millones de dólares en 2020 a 4540 millones de dólares en 2021. Posteriormente, se observa una recuperación gradual, alcanzando los 4832 millones de dólares en 2022 y 4716 millones de dólares en 2023. En 2024, continúa la tendencia a la baja, registrando 4472 millones de dólares. Esta fluctuación podría estar relacionada con cambios en las condiciones de venta, la eficiencia en la gestión de cobros o la composición de la cartera de clientes.
- Provisión como porcentaje de las cuentas por cobrar, brutas
- El porcentaje de la provisión para pérdidas crediticias en relación con las cuentas por cobrar brutas ha aumentado de manera consistente desde el 0.89% en 2020 hasta el 1.19% en 2023. En 2024, se registra una ligera disminución al 1.16%. Este incremento indica una política de mayor cautela en la evaluación del riesgo crediticio, reflejando un aumento en la percepción del riesgo asociado a las cuentas por cobrar. La estabilización en 2024 sugiere una posible consolidación de esta política.
En resumen, los datos indican una gestión del crédito que inicialmente se vuelve más conservadora, aumentando la provisión para pérdidas crediticias en relación con las cuentas por cobrar. La ligera disminución observada en 2024 podría indicar una estabilización de la percepción del riesgo, aunque se mantiene un nivel de provisión superior al observado en 2020.