Balance: activo
El balance general proporciona a los acreedores, inversores y analistas información sobre los recursos (activos) de la empresa y sus fuentes de capital (su patrimonio y pasivos). Normalmente, también proporciona información sobre la capacidad de ganancias futuras de los activos de una empresa, así como una indicación de los flujos de efectivo que pueden provenir de cuentas por cobrar e inventarios.
Los activos son recursos controlados por la empresa como resultado de eventos pasados y de los cuales se espera que fluyan beneficios económicos futuros para la entidad.
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Basado en los informes: 10-K (Fecha del informe: 2017-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2016-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2015-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2014-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2013-12-31).
- Liquidez y fondos disponibles
- El efectivo y equivalentes de efectivo presentan una tendencia decreciente de 2013 a 2017, con una disminución significativa en 2014, seguida de una recuperación en 2015 y una ligera caída posterior, situándose en el nivel más bajo en 2017 en comparación con 2013. Esto puede indicar una reducción en los fondos líquidos de la empresa, aunque todavía mantiene un nivel considerable de efectivo disponible.
- Cuentas por cobrar, netas
- Las cuentas por cobrar muestran un aumento sostenido durante el período, duplicándose aproximadamente en estos cinco años. Esto sugiere un incremento en las ventas a crédito o en los plazos de cobro, lo que podría impactar la liquidez si no se acompaña de una gestión eficiente de cobranza.
- Inventarios
- Los inventarios fluctúan ligeramente, con un nivel cercano a los 2 millones de dólares en 2013, incrementándose en 2014, y luego estabilizándose y aumentando nuevamente en 2017. La tendencia indica que la gestión de inventarios ha sido relativamente estable, aunque un aumento en inventarios puede reducir la rotación y afectar la eficiencia operativa.
- Activos circulantes
- El activo circulante en su conjunto crece en línea con los activos corrientes, alcanzando su punto máximo en 2015 y estabilizándose en niveles elevados en 2017, aunque con una ligera disminución respecto a 2015. Esto refleja una sólida posición de liquidez en términos de activos a corto plazo, aunque con algunos cambios en la composición.
- Bienes y equipo, neto
- Este concepto experimenta una tendencia decreciente significativa, con una reducción en valor en 2017 respecto a 2013, aproximadamente en un 66%. La caída drástica en 2017 puede indicar alta depreciación, desinversiones o desinversiones en activos fijos, afectando la capacidad de la compañía para mantener su infraestructura física.
- Activos intangibles
- Los programas informáticos y la buena voluntad muestran tendencias distintas. Los programas informáticos no están disponibles en todos los años pero alcanzan aproximadamente 815 millones en 2017, una adición de valor que puede reflejar inversiones en tecnología. La buena voluntad y otros activos intangibles mantienen niveles elevados, con una ligera tendencia al alza en 2017, probablemente señalando adquisiciones o inversiones en valor de marca y relaciones comerciales.
- Otros activos y activos no corrientes
- Otros activos permanecen relativamente estables, con leves incrementos, mientras que los activos no corrientes muestran una tendencia de disminución en el período, alcanzando un mínimo en 2016 y posteriormente recuperándose en 2017, una posible señal de desinversiones previas y recuperación posterior.
- Activos totales
- Los activos totales fluctúan en torno a los 53.5 mil millones en 2013, alcanzan un máximo en 2014, disminuyen en 2016 y aumentan nuevamente en 2017, superando los niveles de 2013. La recuperación en 2017 sugiere una gestión que ha logrado reconstituir o incrementar la base de activos tras periodos de disminución.