Estructura del balance: pasivo y patrimonio contable
Basado en los informes: 10-K (Fecha del informe: 2022-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2021-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2020-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2019-12-31), 10-K (Fecha del informe: 2018-12-31).
- Distribución del pasivo y patrimonio neto
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Desde 2018 hasta 2022, la proporción del patrimonio neto en relación con el pasivo total y patrimonio muestra una tendencia creciente, pasando de aproximadamente el 63.68% a cerca del 70.27%. Esto indica una mejora en la estructura financiera, con un mayor énfasis en recursos propios respecto a las obligaciones externas.
Por otro lado, el pasivo total en porcentaje de la combinación de pasivo y patrimonio se ha reducido de aproximadamente el 36.32% en 2018 a 29.73% en 2022, sugiriendo una disminución relativa en la carga de deuda y pasivos respecto a los recursos propios.
- Pasivos y su composición
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El pasivo corriente en relación con el total de pasivos y patrimonio ha disminuido notablemente en 2021, con un porcentaje del 9.62%, pero en 2022 se recupera hasta aproximadamente el 12.98%. Esta fluctuación puede reflejar cambios en la liquidez a corto plazo o en las políticas de financiamiento a corto plazo.
El pasivo no corriente, que incluye obligaciones a largo plazo, ha mantenido una proporción relativamente estable en torno al 20-21%, pero en 2022 muestra una disminución significativa a 16.74%, evidenciando una posible reducción en obligaciones a largo plazo o en la reestructuración de pasivos.
La deuda a largo plazo, neta, fluctúa en torno al 13-15% a lo largo del período, con una ligera reducción en 2022, lo que puede indicar una tendencia hacia la disminución del endeudamiento a largo plazo.
- Pasivos diferidos y otros pasivos
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Los ingresos diferidos, que representan obligaciones relacionadas con ingresos aún no reconocidos, muestran una tendencia de reducción del 8.37% en 2018 a una mínima del 4.46% en 2021, pero en 2022 vuelven a aumentar a 7.63%, señalando cambios en el reconocimiento de ingresos diferidos.
Los impuestos diferidos sobre la renta, que en algunos años presentan valores significativos (hasta 2.54% en 2019), disminuyen en 2022 a aproximadamente 0.58%, posiblemente reflejando cambios en las políticas fiscales o en la estimación de impuestos diferidos.
Otros pasivos mantienen una proporción decreciente, reduciéndose progresivamente desde 6.43% en 2018 hasta 2.98% en 2022, contribuyendo a la reducción general del peso de pasivos en la estructura financiera.
- Patrimonio y sus componentes
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Las utilidades retenidas han aumentado consistentemente en proporción, pasando de aproximadamente el 36.77% en 2018 a cerca del 48.1% en 2022, destacando una política de acumulación de ganancias a lo largo del tiempo.
El capital desembolsado adicional ha mostrado una disminución continua en su proporción, de 61.47% en 2018 a 44.77% en 2022, lo que puede reflejar distribución de dividendos o cambios en la estructura de financiamiento de recursos propios.
El saldo de autocartera, que indica acciones en poder de la propia empresa, ha incrementado en valor absoluto y en porcentaje negativo, pasando de -31.19% en 2018 a -20.32% en 2022, sugiriendo una política de recompra de acciones.
El patrimonio neto en su conjunto ha aumentado en proporción dentro del total, superando el 70% en 2022, consolidando una estructura financiera más sólida y con mayor participación del capital propio en la financiación de la empresa.