Waste Management Inc. (NYSE:WM)

El análisis de los datos revela tendencias significativas en los indicadores de liquidez a lo largo del período examinado.

Coeficiente de Liquidez Corriente

Se observa una fluctuación considerable. Inicialmente, los valores se mantienen relativamente estables, alrededor de 0.75 a 0.87, hasta el tercer trimestre de 2018. Posteriormente, disminuye a 0.69 en el primer trimestre de 2019, seguido de un aumento notable y sostenido hasta alcanzar un máximo de 1.97 en el cuarto trimestre de 2019. A partir de este punto, se registra una disminución gradual, con valores que oscilan entre 0.88 y 1.84 en los trimestres siguientes. En el último período analizado, los valores se sitúan nuevamente en un rango bajo, similar al observado al inicio del período, entre 0.75 y 0.88.

Ratio de Liquidez Rápida

Presenta un comportamiento similar al coeficiente de liquidez corriente, aunque con valores generalmente más bajos. Se mantiene relativamente estable en los primeros trimestres, con un incremento significativo en el segundo trimestre de 2019, alcanzando 1.58. Continúa aumentando hasta 1.87 en el cuarto trimestre de 2019, para luego disminuir de forma progresiva, mostrando una tendencia a la baja en los trimestres posteriores. Los valores finales del período analizado se sitúan entre 0.65 y 0.89.

Ratio de Liquidez en Efectivo

Inicialmente, los valores son muy bajos, inferiores a 0.03. Se observa un incremento sustancial en el segundo trimestre de 2019, alcanzando 0.79, y continúa aumentando hasta 1.13 en el cuarto trimestre de 2019. A partir de este punto, se produce una disminución considerable y constante, regresando a niveles muy bajos en los últimos trimestres del período analizado, situándose entre 0.03 y 0.46.

En general, se aprecia una mejora significativa en los indicadores de liquidez durante 2019, seguida de un deterioro progresivo en los trimestres posteriores. La volatilidad observada en los ratios sugiere cambios en la gestión de activos y pasivos corrientes. La disminución del ratio de liquidez en efectivo en los últimos trimestres podría indicar una menor capacidad para cubrir las obligaciones a corto plazo con activos líquidos inmediatos.

El análisis de los datos financieros revela tendencias significativas en la composición del balance. Se observa una fluctuación en el activo circulante a lo largo del período analizado. Inicialmente, se registra una disminución desde el primer trimestre de 2018 hasta el segundo, seguida de un aumento en el tercer trimestre y una ligera reducción al cierre del año. En el primer trimestre de 2019, el activo circulante experimenta una caída considerable, pero se recupera notablemente en los trimestres siguientes, alcanzando su punto máximo en el cuarto trimestre de 2019. Posteriormente, se observa una disminución constante a lo largo de 2020 y 2021.

En cuanto al pasivo corriente, se aprecia una tendencia general a la disminución desde el primer trimestre de 2018 hasta el segundo trimestre de 2019. Sin embargo, a partir del primer trimestre de 2020, el pasivo corriente aumenta significativamente, alcanzando su valor más alto en el segundo trimestre de 2020. A partir de ese momento, se observa una reducción gradual hasta el cierre de 2021.

Coeficiente de liquidez corriente

El coeficiente de liquidez corriente muestra una variabilidad considerable. Inicialmente, se mantiene relativamente estable en torno a 0.74 y 0.75 en los primeros dos trimestres de 2018, mejorando a 0.87 y 0.85 en los trimestres siguientes. En el primer trimestre de 2019, disminuye a 0.69, pero experimenta un aumento sustancial en los trimestres posteriores, superando la unidad y alcanzando un máximo de 1.97 en el cuarto trimestre de 2019. A partir de 2020, el coeficiente de liquidez corriente vuelve a disminuir, fluctuando alrededor de 1 y descendiendo a 0.75 en el último trimestre de 2021.

La evolución del coeficiente de liquidez corriente sugiere cambios en la capacidad de la entidad para cubrir sus obligaciones a corto plazo con sus activos circulantes. El incremento significativo en 2019 indica una mejora en la liquidez, mientras que la disminución posterior, especialmente en 2020 y 2021, podría señalar una reducción en la capacidad de pago inmediato. La correlación entre las fluctuaciones del activo circulante y el pasivo corriente influye directamente en este ratio, y su análisis conjunto proporciona una visión más completa de la situación financiera.

El análisis de los datos financieros revela tendencias significativas en la liquidez de la entidad durante el período comprendido entre marzo de 2018 y diciembre de 2021.

Activos Rápidos

Se observa una fluctuación en el total de activos rápidos. Inicialmente, se registra una disminución desde 2256 US$ millones en marzo de 2018 hasta 2236 US$ millones en junio de 2018, seguida de un aumento a 2425 US$ millones en septiembre de 2018 y una ligera disminución a 2336 US$ millones en diciembre de 2018. Posteriormente, en marzo de 2019, se produce una caída notable a 2138 US$ millones. A partir de junio de 2019, se experimenta un incremento sustancial, alcanzando los 5880 US$ millones en diciembre de 2019. Esta tendencia positiva se mantiene hasta septiembre de 2020 (5293 US$ millones), para luego disminuir significativamente a 2793 US$ millones en diciembre de 2021.

Pasivo Corriente

El pasivo corriente muestra una disminución general desde 3373 US$ millones en marzo de 2018 hasta 3070 US$ millones en septiembre de 2018. En marzo de 2020, se registra un aumento considerable a 3612 US$ millones, seguido de una disminución a 2806 US$ millones en junio de 2020. Sin embargo, en diciembre de 2020, el pasivo corriente aumenta drásticamente a 5772 US$ millones, para luego disminuir gradualmente a 4082 US$ millones en diciembre de 2021.

Ratio de Liquidez Rápida

El ratio de liquidez rápida presenta una volatilidad considerable. Inicialmente, se mantiene relativamente estable entre 0.67 y 0.79 durante 2018. En marzo de 2019, disminuye a 0.59, pero experimenta un aumento significativo a partir de junio de 2019, alcanzando un máximo de 1.87 en diciembre de 2019. A partir de septiembre de 2020, el ratio comienza a disminuir, llegando a 0.65 en diciembre de 2021. Se observa una correlación inversa entre los cambios en el ratio y las fluctuaciones en los activos rápidos y el pasivo corriente. El incremento en el ratio durante 2019 coincide con el aumento de los activos rápidos y la relativa estabilidad del pasivo corriente. La disminución posterior del ratio se relaciona con la reducción de los activos rápidos y el aumento del pasivo corriente, especialmente en el período 2020-2021.

En resumen, la entidad experimentó un período de mejora en su liquidez rápida a finales de 2019, seguido de una disminución gradual en los años siguientes. Los cambios en el ratio de liquidez rápida parecen estar influenciados principalmente por las fluctuaciones en los activos rápidos y, en menor medida, por los cambios en el pasivo corriente.

El análisis de los datos financieros revela tendencias significativas en la gestión de activos y pasivos corrientes. Se observa una fluctuación considerable en los activos totales en efectivo a lo largo del período analizado.

Activos totales en efectivo

Inicialmente, los valores se sitúan entre 47 y 83 US$ millones, mostrando variabilidad trimestral. A partir del primer trimestre de 2019, se experimenta un aumento sustancial, alcanzando un máximo de 3561 US$ millones en el cuarto trimestre de 2019. Posteriormente, se observa una disminución gradual, aunque los valores se mantienen relativamente altos en comparación con los períodos iniciales. En el último trimestre de 2021, el saldo se reduce a 118 US$ millones.

En cuanto al pasivo corriente, se identifica una tendencia general al alza, con fluctuaciones trimestrales. Los valores oscilan entre 2806 y 5772 US$ millones.

Pasivo corriente

Se aprecia un incremento notable en el segundo trimestre de 2020, alcanzando un pico de 5772 US$ millones, seguido de una disminución en los trimestres posteriores. El pasivo corriente finaliza el período analizado en 4082 US$ millones.

El ratio de liquidez en efectivo presenta una evolución marcada. Inicialmente, los valores son muy bajos, indicando una limitada capacidad para cubrir las obligaciones corrientes con activos en efectivo.

Ratio de liquidez en efectivo

A partir del segundo trimestre de 2019, el ratio experimenta un aumento significativo, superando la unidad en varios trimestres, lo que sugiere una mejora en la liquidez. Sin embargo, a partir del segundo trimestre de 2020, el ratio vuelve a disminuir, situándose por debajo de 0.50 y, finalmente, en valores muy bajos en los últimos trimestres del período analizado (0.03 y 0.04). Esta disminución indica un deterioro en la capacidad de la entidad para cubrir sus pasivos corrientes con activos en efectivo.

En resumen, la entidad experimentó un aumento significativo en sus activos en efectivo a partir de 2019, seguido de una disminución gradual. El pasivo corriente mostró una tendencia al alza, con un pico en 2020. El ratio de liquidez en efectivo, aunque mejoró sustancialmente en 2019, se deterioró significativamente en 2020 y 2021, lo que podría indicar una creciente presión sobre la liquidez de la entidad.