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El ratio de rotación de inventario muestra una tendencia general decreciente en los primeros períodos analizados, disminuyendo de valores cercanos a 3.39 en agosto de 2019 a valores por debajo de 2.99 en noviembre de 2021. Sin embargo, después de ese punto, comienza a estabilizarse y vuelve a experimentar algunos incrementos, alcanzando 3.04 en octubre de 2024. Este patrón sugiere un período de mayor eficiencia en la gestión del inventario en los primeros años, seguido por cierta estabilización y suavización en ciclos posteriores.

El índice de rotación de cuentas por cobrar muestra una fluctuación significativa en los valores a lo largo del período, comenzando en valores cercanos a 98.94 en mayo de 2019, descendiendo a mínimos cercanos a 61.02 en abril de 2023, y posteriormente recuperando niveles cercanos a 88.11 en febrero de 2025. La tendencia indica una mayor eficiencia en la gestión de cobros en ciertos períodos, pero también períodos de aumento en la morosidad, reflejados en valores más altos en algunos ciclos recientes.

El ratio de rotación de cuentas por pagar también presenta variaciones, con un valor alto de 21.95 en mayo de 2019 y una tendencia descendente, alcanzando mínimos en torno a 9.14 en enero de 2021. Después, se observa una recuperación en los valores, alcanzando 15.91 en febrero de 2025. Esto puede indicar una mayor laxitud en los plazos de pago o cambios en la negociación con proveedores durante los diferentes ciclos.

En cuanto al ratio de rotación del capital circulante, se observa una tendencia a la estabilización, con valores que oscilan en torno a 4 a 6 en los últimos períodos, con un pico destacado de 6.06 en octubre de 2021. La variación en estos niveles indica cambios en la gestión del capital de trabajo, pudiendo reflejar esfuerzos por optimizar la utilización de recursos a lo largo del tiempo.

Los días de rotación de inventario muestran un patrón variable, con picos significativos en período cercano a 195 días en octubre de 2022, pero también períodos con valores menores a 122 días. La tendencia general es hacia un incremento en los días de inventario hasta alcanzar los valores máximos en períodos recientes, lo que podría señalar una acumulación mayor de inventario o una estrategia de almacenamiento más prolongada.

Los días de rotación de cuentas por cobrar permanecen relativamente estables, en un rango cercano a 4-6 días en la mayoría del período, con un ligero incremento en algunos ciclos, alcanzando hasta 6 días en años posteriores. Esto indica una política de cobro relativamente eficiente y consistente en la gestión de las cuentas por cobrar.

El ciclo de funcionamiento, que combina rotación de inventario, cuentas por cobrar y pagar, evoluciona con un incremento notable, desde aproximadamente 112 días en mayo de 2019 hasta valores cercanos a 200 días en octubre de 2022. A partir de ese máximo, tiende a disminuir ligeramente, sugiriendo cambios en la eficiencia del ciclo operativo o en las políticas de gestión del ciclo de efectivo.

Por último, el ciclo de conversión de efectivo muestra una tendencia igualmente ascendente en los primeros años, alcanzando 166 días en octubre de 2022, y posteriormente estabilizándose en niveles alrededor de 125 a 135 días en años recientes. La duración más larga del ciclo de conversión de efectivo en ciertos períodos puede reflejar una estrategia de gestión de liquidez o cambios en los plazos de pago y cobro que afectan la liquididez de la operación.

El análisis de los datos financieros revela varias tendencias importantes a lo largo del período observado.

El costo de los bienes vendidos presenta una tendencia general al alza, evidenciándose un incremento sustancial en ciertos períodos, en particular hacia finales del ciclo, alcanzando un valor de aproximadamente US$1,52 mil millones en el período más reciente. Este incremento puede indicar un aumento en la producción o en la venta de productos, o bien un incremento en los costos asociados.

Por otro lado, los inventarios muestran una tendencia de crecimiento constante en términos absolutos, con un aumento importante de aproximadamente 1.46 millones de dólares en el período más reciente, alcanzando más de 1.65 millones de dólares. Esto sugiere una acumulación de inventarios que podría estar relacionada con expectativas de incremento en ventas futuras o con dificultades en la rotación de inventarios.

El ratio de rotación de inventario evidencia una tendencia decreciente en la mayor parte del período, pasando de valores cercanos a 3.39 en agosto de 2019 a valores alrededor de 2.33-2.38 en los períodos más recientes. La disminución de esta ratio indica que la empresa está tardando más tiempo en vender y reemplazar sus inventarios, lo cual puede ser un indicativo de incrementos en los niveles de inventarios o una reducción de la eficiencia en la gestión de los mismos.

En términos de la relación entre inventarios y ventas (implícita en el ratio de rotación), la disminución del ratio podría derivar de una desaceleración en la rotación de inventarios o un aumento desproporcionado de inventarios en relación con las ventas, lo cual puede afectar negativamente la liquidez y la eficiencia operativa.

En conjunto, estos patrones sugieren un incremento en la inversión en inventarios acompañado de una menor rotación, lo cual podría reflejar estrategias de acumulación para captar mayor demanda futura o problemas en la gestión de inventarios que podrían requerir atención para mejorar la eficiencia y optimizar los recursos.

Patrón de ingresos netos

Se observa una tendencia general de crecimiento en los ingresos netos a lo largo de los períodos analizados. Desde un valor de aproximadamente US$782 millones en mayo de 2019, los ingresos se incrementan significativamente en los meses posteriores, alcanzando un pico cercano a US$3.612 millones en mayo de 2025. Es importante notar que, si bien hay fluctuaciones trimestrales, la tendencia a largo plazo muestra una recuperación y expansión sostenida, especialmente visible en los períodos posteriores a la mitad de 2020, que parece marcar un punto de inflexión en el crecimiento de ingresos tras una posible estabilización o ralentización en los primeros años.

Cuentas por cobrar, netas

Las cuentas por cobrar netas muestran una tendencia ascendente en términos absolutos desde cerca de US$20.105 millones en mayo de 2019 a aproximadamente US$141.241 millones en febrero de 2025. Aunque existen ligeras fluctuaciones en algunos períodos, en general la cantidad de cuentas por cobrar ha aumentado de forma consistente, reflejando un incremento en las ventas a crédito o en el volumen de operaciones comerciales. Sin embargo, la relación entre el saldo de cuentas por cobrar y los ingresos netos, que puede medirse mediante el índice de rotación, también muestra variaciones, indicando posibles cambios en la eficiencia en la cobranza o en las políticas crediticias con el tiempo.

Índice de rotación de cuentas por cobrar

Este ratio presenta fluctuaciones en sus valores a lo largo del período, oscillando entre aproximadamente 61.02 y 98.38. La tendencia no es lineal, pero en general mantiene valores relativamente altos, lo que indica una gestión eficiente en la recuperación de las cuentas por cobrar durante la mayoría de los períodos analizados. Un valor alto en este índice suele sugerir que las cuentas por cobrar se cobran en un período relativamente corto, contribuyendo a una mejor liquidez. Sin embargo, las fluctuaciones podrían reflejar cambios en la política de crédito o en la velocidad de cobro operacional en distintos períodos.

Análisis del costo de los bienes vendidos

El costo de los bienes vendidos muestra una tendencia general al alza a lo largo del período analizado, pasando de aproximadamente US$ 360.595 miles en mayo de 2019 a cerca de US$ 1.429.545 miles en febrero de 2025. Se observa un incremento significativo en ciertos periodos, especialmente en los años posteriores a 2020, reflejando potencialmente un aumento en la producción, ventas o costos asociados a la expansión de la empresa. Esta tendencia ascendente puede también estar relacionada con un aumento en la demanda o en los precios de los insumos, o con una mayor escala operativa en la compañía.

Variación en las cuentas a pagar

Las cuentas a pagar inicialmente presentan fluctuaciones, pero en general, muestran un incremento hacia 2025, alcanzando US$ 271.406 miles en febrero de 2025 desde valores inferiores en los años anteriores. En algunos periodos, se observa un incremento pronunciado, como en enero de 2022 y 2023, y posteriormente en 2024. Este patrón puede reflejar una mayor volumen de compras a crédito, cambios en la política de pagos o en la negociación con proveedores, o un aumento en la financiación a corto plazo para apoyar el crecimiento de las operaciones.

Rotación de cuentas por pagar

El ratio de rotación de cuentas por pagar fluctúa considerablemente a lo largo del período. En algunos momentos muestra valores altos, como 20.95 en octubre de 2021 y 15.91 en enero de 2025, indicando que la empresa puede estar pagando sus cuentas con mayor frecuencia en ciertos periodos, reduciendo el período medio de pago. En otros momentos, el ratio baja a valores cercanos a 9 o 10, lo cual indica un período más extendido para saldar las cuentas pendientes, posiblemente buscando optimizar la gestión de efectivo o aprovechar mejores condiciones crediticias. La tendencia general no se delinea claramente como ascendente o descendente, pero la alta variabilidad puede ser indicativa de cambios en las condiciones de pago o en la política financiera de la empresa durante los diferentes trimestres.

Patrón de capital de explotación

El capital de explotación muestra una tendencia general al alza a lo largo del período analizado, con un incremento significativo en los valores desde aproximadamente 668,642 mil US$ en mayo de 2019 hasta alcanzar un pico de 2,010,132 mil US$ en febrero de 2025. Este aumento constante indica una expansión en la base de activos operativos de la empresa. A lo largo de varias fechas, se observa cierta volatilidad, pero predominantemente la tendencia refleja un crecimiento sostenido en la inversión en activos operativos, posiblemente para sostener la expansión de las operaciones y soportar mayores niveles de ingresos.

Ingresos netos

Los ingresos netos exhiben una trayectoria de crecimiento significativa, con valores que aumentan de 782,315 mil US$ en mayo de 2019 a 3,610,497 mil US$ en febrero de 2025. Se observa una marcada expansión a partir de mediados de 2020, donde los ingresos crecen de manera acelerada, alcanzando picos importantes en 2022 y 2023, lo que refleja una tendencia positiva en la generación de ventas. La tendencia indica una recuperación y crecimiento robusto, posiblemente motivados por una mayor demanda y expansión de mercado, aunque se registran algunos periodos de estabilización y ligeras caídas, especialmente en 2021 y 2022, antes de continuar la tendencia ascendente.

Ratio de rotación del capital circulante

El ratio de rotación del capital circulante presenta fluctuaciones en el período, pero se aprecia una tendencia general de aumento. La ratio inicia en valores que no están reportados específicamente, aparece en 3.35 en agosto de 2019, y alcanza un máximo de 6.06 en noviembre de 2020. Posteriormente, aunque con altibajos, el ratio mantiene valores relativamente altos, cerrando en 5.35 en enero de 2025. La mejora en este ratio sugiere una mayor eficiencia en el uso del capital circulante para generar ingresos, aunque también refleja posibles cambios en la gestión del inventario, cuentas por cobrar y cuentas por pagar, acordes con un crecimiento sostenido en las operaciones y la expansión de la actividad comercial. Es importante destacar que las fluctuaciones en el ratio parecen estar vinculadas a variaciones en la gestión del ciclo operativo durante los distintos períodos.

Razón de rotación de inventario

La razón de rotación de inventario muestra fluctuaciones a lo largo del período analizado, evidenciando una tendencia inicial a la baja seguida de una recuperación en los valores hacia los últimos meses. Desde niveles cercanos a 3.39 en agosto de 2019, se observa una disminución progresiva con algunos picos intermedios, alcanzando un mínimo de 1.88 en abril de 2023. Posteriormente, los valores tienden a estabilizarse en torno a 2.65 a 2.99 en los últimos meses, lo que indica una posible recuperación en la eficiencia con que la empresa gestiona sus inventarios.

Días de rotación de inventario

Los días necesarios para rotar el inventario, que inversamente se relaciona con la razón de rotación, siguen una tendencia similar, aunque en sentido opuesto. Se inicia en aproximadamente 108 días en mayo de 2019 y aumenta progresivamente hasta alcanzar picos de alrededor de 195 días en octubre de 2022, reflejando una reducción en la eficiencia de rotación del inventario durante este período. Posteriormente, la tendencia se invierte modestamente, alcanzando valores cercanos a 138 días en enero de 2025. Esto sugiere que, en períodos recientes, la empresa ha logrado mejorar la gestión de inventarios, reduciendo los días de rotación.

Indicador de rotación de cuentas por cobrar

El índice de rotación de cuentas por cobrar muestra una tendencia general de estabilidad alrededor de valores cercanos a 80, con algunos períodos presentando valores más elevados, cercanos a 98, y otros más bajos, aproximadamente en 61. La fluctuación en este indicador indica que, en ciertos períodos, la empresa logra gestionar sus cuentas por cobrar de manera más eficiente, alcanzando una mayor rotación, mientras que en otros períodos la rotación se reduce, sugiriendo una demora en la cobranza o mayor plazo de crédito ofrecido a los clientes.

Días de rotación de cuentas por cobrar

El número de días promedio para cobrar las cuentas se mantiene principalmente en un rango de 4 a 6 días en la mayor parte del período analizado. La consistencia en estos días indica una política de crédito relativamente estable y un proceso de cobranza eficiente. La mínima variación refleja eficiencia en la gestión de cuentas por cobrar, aunque un aumento puntual a 6 días en algunos períodos puede señalar ocasionales retrasos o cambios en las condiciones de pago de los clientes.

Patrón en los días de rotación de inventario

Durante el período analizado, se observa una tendencia general de aumento en los días de rotación de inventario desde poco más de 108 días en agosto de 2019 hasta alcanzar un pico de 195 días en octubre de 2022.

Este incremento sugiere una tendencia hacia una gestión de inventarios más prolongada, lo cual podría estar asociado con estrategias de mantenimiento de inventario o cambios en la demanda del mercado.

Luego de alcanzar dicho pico, se evidencia una disminución en los días de rotación en 2023, situándose en 138 días a finales de ese año, lo que indica una posible optimización o rotación más rápida del inventario en dicho período.

Comportamiento en los días de rotación de cuentas por cobrar

Por otro lado, los días de rotación de cuentas por cobrar permanecen bastante estables, en un rango entre 4 y 6 días a lo largo de toda la serie temporal.

Este rango constante refleja una política crediticia consistente y eficiente en el cobro, lo que contribuye a una gestión financiera predecible y controlada en relación con las cuentas por cobrar.

Variaciones en el ciclo de funcionamiento

El ciclo de funcionamiento muestra una tendencia a la alza desde aproximadamente 112 días en mayo de 2019 hasta un máximo de 200 días en enero de 2023.

Este incremento indica una ampliación en el período que comprende desde la adquisición de inventarios hasta la cobranza, reflejando probablemente un aumento en los inventarios y/o en los días de cuentas por cobrar, influenciado por las decisiones de gestión o cambios en la demanda del mercado.

Tras ese pico, en 2023, el ciclo reduce a valores en torno a los 126 días, sugiriendo una mejora en la eficiencia del ciclo operativo, posiblemente por una rotación más rápida del inventario o una gestión más efectiva de cobros.

La tendencia en el ratio de rotación de cuentas por pagar muestra un comportamiento variable a lo largo del tiempo. En los primeros períodos, no existen datos disponibles, pero a partir del tercer trimestre de 2019 se observa una fluctuación significativa. En el último trimestre de 2019, el ratio disminuye a 14.08, indicando que la empresa tarda más en pagar sus cuentas en comparación con períodos anteriores. Durante 2020, esta relación muestra un descenso a valores cercanos a 11, aproximadamente, en la mayoría de los trimestres, sugiriendo una estrategia de pago más eficiente o cambios en las condiciones de crédito con proveedores. En 2021, el ratio fluctúa entre 10.86 y 20.95, mostrando cierta volatilidad que puede reflejar cambios en la política de pagos o en las condiciones de mercado, con picos en el primer trimestre y un descenso en el último. Para 2022 y 2023, la relación vuelve a estabilizarse en rangos similares, entre aproximadamente 12 y 15, indicando una consistencia en la gestión de cuentas por pagar, aunque con algunos picos y valles. Hasta el primer semestre de 2024, el ratio mantiene niveles similares, pero en el último período registrado casi alcanza un valor alto de 15.91, lo cual puede señalar un aumento en el período de pago. En general, los cambios en el ratio reflejan una estrategia variable que combina momentos de pagos más acelerados con otros en los que se extienden los plazos, posiblemente en respuesta a condiciones crediticias o necesidades de gestión de liquidez.

Por otro lado, los días de rotación de cuentas por pagar también exhiben variaciones notables en los mismos períodos. En los primeros registros, los días oscilan entre 17 y 26 días, indicando que en esos momentos la empresa realiza pagos relativamente rápidos. En 2020, esta cifra aumenta progresivamente a un rango de 32 a 40 días, con un pico en el cuarto trimestre de 2020, sugiriendo una extensión en los plazos de pago. En 2021, los días se mantienen en torno a 29 a 34, con cierta fluctuación que refleja continuos cambios en la política de pagos. Para 2022 y 2023, los días de rotación vuelven a estabilizarse, en torno a 23 a 29 días, en línea con una gestión más consistente. A comienzos de 2024, se observa un descenso a 23 días, pero en los períodos siguientes vuelven a incrementarse, alcanzando hasta 34 días en el cuarto trimestre de 2024, lo que indica un período más prolongado en los pagos. En general, los días de rotación reflejan una estrategia que alterna entre pagos relativamente rápidos y extensiones más largas, posiblemente en respuesta a condiciones de mercado, negociación con proveedores o decisiones de gestión de liquidez.

Patrón de rotación de inventario

Se observa una tendencia general de aumento en los días de rotación de inventario a lo largo del período analizado. Desde valores cercanos a los 108 días en agosto de 2019, la rotación incrementa progresivamente, alcanzando picos de hasta 195 días en enero de 2023. Esto indica que la empresa ha estado tardando más tiempo en vender su inventario en ciertos períodos, lo cual podría reflejar cambios en la gestión de inventarios, en la demanda del mercado o en la estrategia de inventariado.

Patrón de rotación de cuentas por cobrar

Los días de rotación de cuentas por cobrar se mantienen relativamente estables y bajos a lo largo del período, fluctuando principalmente entre 4 y 6 días, excepto en algunos períodos donde se observa una ligera variación a 6 días. Esto sugiere una política de cobro eficiente y una cobranza acelerada, con una tendencia a la estabilidad en la gestión de cuentas por cobrar.

Patrón de rotación de cuentas por pagar

Los días de rotación de cuentas por pagar muestran una tendencia variable, con algunos picos importantes, alcanzando hasta 40 días en ciertos períodos (junio y diciembre de 2021). En otros momentos, los valores son más cortos, alrededor de 17 a 29 días. La variabilidad indica posibles cambios en las políticas de pago o en las condiciones negociadas con proveedores, así como en la gestión de las obligaciones a corto plazo.

Patrón del ciclo de conversión de efectivo

El ciclo de conversión de efectivo presenta una tendencia volátil con picos elevados en ciertos períodos, especialmente en 2022 y 2023, alcanzando valores de hasta 166 días en enero de 2023. En cambio, en otros períodos como agosto de 2021 y abril de 2023, el ciclo se mantiene por debajo de los 100 días. La existencia de estos picos puede indicar momentos de mayor retención de efectivo debido a movimientos en inventarios, cuentas por cobrar o cuentas por pagar. La variabilidad puede reflejar la adaptación a condiciones del mercado o cambios en la estrategia operativa.