Estructura del balance: pasivo y patrimonio contable
Datos trimestrales
Charter Communications Inc., estructura del balance consolidado: pasivos y patrimonio contable (datos trimestrales)
Basado en los informes: 10-Q (Fecha del informe: 2025-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2025-03-31), 10-K (Fecha del informe: 2024-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2024-09-30), 10-Q (Fecha del informe: 2024-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2024-03-31), 10-K (Fecha del informe: 2023-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2023-09-30), 10-Q (Fecha del informe: 2023-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2023-03-31), 10-K (Fecha del informe: 2022-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2022-09-30), 10-Q (Fecha del informe: 2022-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2022-03-31), 10-K (Fecha del informe: 2021-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2021-09-30), 10-Q (Fecha del informe: 2021-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2021-03-31), 10-K (Fecha del informe: 2020-12-31), 10-Q (Fecha del informe: 2020-09-30), 10-Q (Fecha del informe: 2020-06-30), 10-Q (Fecha del informe: 2020-03-31).
- Tendencias en la composición del pasivo y patrimonio neto
- Durante el período analizado, se observa un incremento progresivo en la proporción del pasivo total respecto al patrimonio neto, alcanzando aproximadamente el 91% a finales de 2022, antes de disminuir ligeramente hacia el final del período. Además, la participación del pasivo a largo plazo en el pasivo total se mantiene en niveles elevados, superando en varias ocasiones el 80%, indicando una estructura de financiamiento predominantemente a largo plazo.
- Deuda a largo plazo y deuda corriente
- La deuda a largo plazo, menos la parte corriente, representa más de la mitad del pasivo total en la mayor parte del período, con una tendencia en aumento hasta aproximadamente el 66%, consolidando una estructura de financiamiento de largo plazo. La porción actual de la deuda a largo plazo muestra fluctuaciones, con aumentos notables en ciertos trimestres, sugiriendo cambios en las estrategias de refinanciamiento o en los vencimientos de la deuda.
- Pasivo corriente y cuentas por pagar
- El pasivo corriente y las cuentas por pagar en relación con el pasivo total muestran un incremento general, con porcentajes que se sitúan en niveles cercanos al 9% en los trimestres finales, reflejando potencialmente incrementos en obligaciones a corto plazo o en la gestión de pasivos corrientes.
- Índices de solvencia y estructura de financiamiento
- Se evidencia una disminución sostenida en el capital neto total de los accionistas, que pasa de alrededor del 20% del total del pasivo y patrimonio en 2020 a cerca del 13% en 2024, indicando una tendencia a una mayor carga de pasivos respecto a los recursos propios. Similarmente, las utilidades retenidas acumuladas reflejan una tendencia negativa, alcanzando valores en déficit, lo cual señala una posible pérdida de ingresos o distribución de dividendos por encima de las ganancias.
- Participaciones y patrimonio neto total
- Las participaciones minoritarias y el patrimonio neto total también muestran una tendencia de disminución del porcentaje del pasivo y patrimonio respecto al total, aunque con cierta estabilización hacia finales del período. El patrimonio total, en particular, fluctúa en torno al 13% en los últimos trimestres, manteniendo una menor participación relativa en la estructura del financiamiento.
- Facilidad de financiamiento para planes de cuotas y otros pasivos a largo plazo
- La facilidad del plan de cuotas de equipos aparece en niveles bajos pero en ascenso hacia finales del período, alcanzando valores cercanos a 0.86%, lo que podría indicar un incremento en financiamiento destinado a adquisición de activos mediante planes de cuotas.
- Impuestos diferidos y otros pasivos a largo plazo
- La proporción de impuestos diferidos sobre la renta mantiene una tendencia de crecimiento gradual, alcanzando cerca del 12.37% hacia finales del período, mientras que los otros pasivos a largo plazo permanecen relativamente estables, en torno al 3% del pasivo total y patrimonio.
- Resumen general
- En conjunto, la estructura financiera revela una tendencia hacia un mayor apalancamiento a largo plazo, con un incremento progresivo en el peso del pasivo total respecto al patrimonio neto. La disminución en el capital neto y en las utilidades retenidas evidencia potencialmente una presión sobre la solvencia o rentabilidad de la entidad. La estabilización de ciertos indicadores hacia finales del período puede indicar esfuerzos de ajuste financiero o restructuraciones, aunque siempre con una estructura de financiamiento fundamentada en altos niveles de deuda a largo plazo. La gestión de pasivos corrientes y planes de financiamiento para activos fija también reflejan cambios en la estrategia financiera en respuesta a las condiciones del mercado o de la empresa.