Linde plc (NASDAQ:LIN)

El análisis de los datos revela tendencias notables en los indicadores de liquidez a lo largo del período examinado.

Coeficiente de liquidez corriente

Se observa una fluctuación en este ratio, comenzando en 0.74 en marzo de 2021. Presenta un descenso inicial hasta 0.71 en junio de 2021, seguido de una recuperación a 0.81 en septiembre del mismo año. Posteriormente, se registra una ligera disminución a 0.74 en diciembre de 2021. A partir de marzo de 2022, se aprecia una tendencia general al alza, alcanzando un máximo de 0.96 en diciembre de 2022. En 2023, el ratio se mantiene relativamente estable, con fluctuaciones menores, y continúa mostrando valores superiores a 0.78. En 2024, se observa una ligera disminución, aunque se mantiene por encima de 0.89. Finalmente, en los primeros trimestres de 2025, se registra una disminución más pronunciada, llegando a 0.82 en septiembre de 2025.

Ratio de liquidez rápido

Este ratio muestra un comportamiento similar al coeficiente de liquidez corriente, aunque con valores consistentemente más bajos. Comienza en 0.56 en marzo de 2021 y experimenta un descenso a 0.52 en junio de 2021, seguido de una recuperación a 0.63 en septiembre de 2021. A lo largo de 2022, se observa una tendencia al alza, alcanzando un máximo de 0.73 en diciembre de 2022. En 2023, el ratio se estabiliza en torno a 0.6, con fluctuaciones menores. En 2024, se mantiene en un rango similar, y en 2025 se observa una disminución a 0.62 en septiembre.

Ratio de liquidez en efectivo

Este ratio presenta la mayor volatilidad de los tres. Comienza en 0.27 en marzo de 2021, disminuye a 0.21 en junio de 2021, y luego se recupera a 0.32 en septiembre de 2021. A lo largo del período analizado, el ratio fluctúa significativamente, sin una tendencia clara definida. Se observa un máximo de 0.37 en diciembre de 2022 y en septiembre de 2025, y mínimos de 0.21 en junio de 2021 y diciembre de 2021. En general, los valores de este ratio son relativamente bajos en comparación con los otros dos indicadores de liquidez.

En resumen, se identifica una mejora general en los indicadores de liquidez entre 2021 y 2022, seguida de una estabilización en 2023 y una ligera disminución en 2024 y los primeros trimestres de 2025. El ratio de liquidez en efectivo, aunque más volátil, se mantiene en niveles relativamente bajos a lo largo del período.

El análisis de los datos revela tendencias significativas en la composición del balance y en la liquidez a lo largo del período examinado.

Activo Circulante

Se observa una fluctuación en el activo circulante. Inicialmente, se registra una disminución desde el primer trimestre de 2021 hasta el segundo, seguida de un aumento en el tercer trimestre. Posteriormente, se aprecia una reducción al cierre de 2021. A partir de 2022, el activo circulante muestra una tendencia general al alza, con variaciones trimestrales, alcanzando su punto más alto en el cuarto trimestre de 2024. En el primer semestre de 2025, se observa una ligera disminución, aunque permanece en niveles elevados en comparación con los períodos iniciales.

Pasivo Corriente

El pasivo corriente presenta una trayectoria ascendente más consistente. A pesar de algunas fluctuaciones trimestrales, se mantiene en niveles superiores a los del activo circulante durante la mayor parte del período. Se identifica un incremento notable a lo largo de 2022 y 2023, con un pico en el tercer trimestre de 2023. Aunque disminuye ligeramente en el primer trimestre de 2024, se recupera y continúa aumentando hasta el primer semestre de 2025.

Coeficiente de Liquidez Corriente

El coeficiente de liquidez corriente, calculado a partir del activo y pasivo circulante, fluctúa en torno a la unidad. Inicialmente, se sitúa por debajo de 1, indicando una posible dificultad para cubrir las obligaciones a corto plazo con los activos circulantes. A partir del segundo trimestre de 2022, el ratio se mantiene mayoritariamente por encima de 0.7, mostrando una mejora gradual en la capacidad de pago. Se observa un aumento significativo en el primer trimestre de 2024, alcanzando valores superiores a 0.9, lo que sugiere una mayor solidez financiera. Sin embargo, en el primer semestre de 2025, el ratio experimenta una ligera disminución, aunque se mantiene en un nivel aceptable.

En resumen, se aprecia una tendencia general al aumento tanto del activo como del pasivo circulante, con una mejora en el coeficiente de liquidez corriente a partir de 2022. La evolución del pasivo corriente es más pronunciada que la del activo circulante, lo que requiere un seguimiento continuo para asegurar la estabilidad financiera.

El análisis de los datos revela tendencias significativas en la composición del balance y la capacidad de cubrir obligaciones a corto plazo.

Activos Rápidos

Se observa una fluctuación en el total de activos rápidos a lo largo del período analizado. Inicialmente, se registra una disminución desde el primer trimestre de 2021 hasta el segundo, seguida de un aumento en el tercer trimestre. Posteriormente, se aprecia una reducción al cierre de 2021. A partir de 2022, la tendencia general es ascendente, con un pico en el cuarto trimestre de 2022, aunque con variaciones trimestrales. En 2023, se mantiene una cifra elevada, con una ligera disminución en el primer trimestre, seguida de una recuperación. Esta tendencia se mantiene en 2024, con fluctuaciones menores. En los primeros trimestres de 2025, se observa una ligera disminución.

Pasivo Corriente

El pasivo corriente muestra una tendencia general al alza durante el período. Se observa una disminución entre el primer y cuarto trimestre de 2021. A partir de 2022, el pasivo corriente aumenta de manera constante, alcanzando su máximo en el tercer trimestre de 2022. En 2023, se registra una disminución significativa en el primer trimestre, seguida de un aumento en el tercer trimestre. Esta tendencia continúa en 2024, con fluctuaciones trimestrales. En los primeros trimestres de 2025, se observa un aumento notable.

Ratio de Liquidez Rápida

El ratio de liquidez rápida presenta una volatilidad moderada. Inicialmente, se observa una disminución desde el primer trimestre de 2021 hasta el segundo, seguida de una mejora en el tercer trimestre. A lo largo de 2022, el ratio se mantiene relativamente estable, con una ligera mejora en el cuarto trimestre. En 2023, se observa una tendencia al alza, alcanzando su punto máximo en el cuarto trimestre. Esta tendencia positiva continúa en 2024, con fluctuaciones menores. En los primeros trimestres de 2025, se observa una disminución.

En resumen, aunque el total de activos rápidos fluctúa, el pasivo corriente muestra una tendencia general al alza. El ratio de liquidez rápida, si bien variable, se mantiene en un rango que sugiere una capacidad razonable para cubrir las obligaciones a corto plazo, con una mejora notable en los últimos trimestres analizados. La evolución del ratio de liquidez rápida no sigue directamente la evolución del pasivo corriente, lo que sugiere que la gestión de activos y pasivos está siendo activa.

El análisis de los datos financieros revela tendencias significativas en la gestión de efectivo y las obligaciones a corto plazo.

Activos totales en efectivo

Se observa una fluctuación considerable en los activos totales en efectivo a lo largo del período analizado. Inicialmente, se registra un valor de 4096 US$ millones en marzo de 2021, seguido de una disminución en junio del mismo año. Posteriormente, se aprecia un aumento hasta alcanzar los 4700 US$ millones en septiembre de 2021, para luego disminuir nuevamente en diciembre de 2021. Esta volatilidad continúa en los años siguientes, con picos y valles que sugieren una gestión activa del efectivo, posiblemente influenciada por factores operativos o estratégicos. En general, se identifica una tendencia a la estabilización en los últimos trimestres, con valores que oscilan entre 4509 y 5294 US$ millones.

Pasivo corriente

El pasivo corriente muestra una tendencia general al alza durante el período. Se parte de 15027 US$ millones en marzo de 2021 y, aunque presenta fluctuaciones trimestrales, se observa un incremento constante hasta alcanzar los 16479 US$ millones en septiembre de 2022. Posteriormente, se registra una disminución en diciembre de 2022, seguida de un nuevo aumento en marzo de 2025, llegando a 16192 US$ millones. Este incremento sugiere un aumento en las obligaciones a corto plazo de la entidad.

Ratio de liquidez en efectivo

El ratio de liquidez en efectivo presenta una variabilidad moderada a lo largo del tiempo. Inicialmente, se sitúa en 0.27 en marzo de 2021, experimentando una disminución en el trimestre siguiente. A partir de ese momento, el ratio fluctúa entre 0.21 y 0.37, sin una tendencia clara ascendente o descendente. Se observa una ligera mejora en los últimos trimestres, con valores que se mantienen consistentemente por encima de 0.30. Esta fluctuación indica que la capacidad de la entidad para cubrir sus pasivos corrientes con activos en efectivo varía trimestralmente, pero se mantiene en un rango relativamente estable.

En resumen, la entidad gestiona activamente sus activos en efectivo, mientras que sus obligaciones a corto plazo muestran una tendencia general al alza. El ratio de liquidez en efectivo se mantiene en un rango moderado, lo que sugiere una capacidad de cobertura de pasivos corrientes relativamente estable, aunque variable.